No todo es samba: brasileños que no consiguieron brillar en el Real Madrid
Pese a que Rodrygo y Vinicius se están llevando todos los halagos de la afición madridista, varios de sus compatriotas nunca llegaron a despuntar vistiendo la camiseta madridista.
Didi
El segundo brasileño en la historia del Madrid (el primero fue Giudicelli en la campaña 1935-36) sólo estuvo una campaña pese a estar considerado una estrella mundial. La leyenda dice que los celos con Di Stéfano y una polémica con su mujer acabaron con su salida del club blanco
Vítor
El brasileño llegó para reforzar el lateral derecho. El conjunto blanco quería a Cafú y acabó apostando por un jugador que no triunfó ya que únicamente jugó 3 partidos. En Brasil se le recuerda por ser un destacado jugador de equipos del calibre del Vasco de Gama, del Cruzeiro, del Sao Paulo, del Botafogo o del Corinthians.
Zé Roberto
Ze Roberto apenas estuvo una temporada y prácticamente no brilló. En su defecto, se puede considerar a Capello partícipe de su escaso éxito: le colocaba de lateral zurdo, cuando su puesto era el de centrocampista por la banda zurda. Su paso efímero de blanco contrasta con su alto nivel mostrado en Alemania... Fue campeón de la Liga de Campeones con el Real Madrid en 1998.
Sávio Bortolini
Savio llegó en 1997, tras brillar en un encuentro entre el Madrid y el Flamengo del trofeo Ciudad de Palma. Marcó un gol y trajo por la calle de la amargura a la zaga madridista. Podía actuar o bien como centrocampista o bien como delantero, pero sus continuas lesiones hicieron mella en él...
Flávio Conceicao
Flavio Conceiçao fue uno de los primeros fichajes galácticos de Florentino Pérez. Fue galáctico por el precio que pagó por él para el rendimiento que luego tuvo. Presentado con Makelele, sus continuas lesiones frenaron su carrera en el club blanco
Júlio César Santos Correa
33 partidos fueron los que jugó el defensor con la camiseta del Real Madrid en los que consiguió proclamarse campeón de Europa con el Madrid en el 2000. Pasó por equipos como AC Milán, Tigres UANL, Real Betis, Real Valladolid, Real Sociedad o Benfica.
Julio Baptista
Julio Baptista llegó en 2005 a las filas del conjunto blanco. Recordado por el gol que marcó al Barcelona en el Camp Nou, nunca recordó al futbolista potente y llegador que brilló en el Sevilla.
Robinho
Ágil, veloz, maravillaba con el control. Su debut en Cádiz fue prodigioso, cautivando a todos los aficionados. Pero se fue diluyendo hasta acabar pidiendo su traspaso. Acabó en el Manchester City por algo más de 40 millones de euros.
Emerson
Petición expresa de Fabio Capello cuando llegó al Madrid en 2006, 'El Puma' fue de todo menos su apodo. Se llegó a decir que incluso llegó a pactar con el técnico italiano no ir convocado en los partidos de casa.
Kaká
Kaká fue uno de los primeros fichajes de Florentino Pérez en su segunda etapa. El brasileño tuvo altibajos a lo largo de sus cuatro temporadas. En septiembre de 2013, regresó al Milán, desde donde había llegado en 2009.
Lucas Silva
Este fichaje brasileño apenas duró seis meses en la primera plantilla madridista. Llegado en el mercado invernal de 2015, en verano de ese año se marchó cedido al Olympique de Marsella... El Madrid había pagado 14 millones por él al Cruzeiro.
Cicinho
Una rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha hizo que la carrera del defensor nacido en Pradópolis no fuera la esperada en el conjunto blanco. Únicamente disputó 32 partidos con la camiseta del Real Madrid.
Reinier
El jugador de Brasilia llegó al Real Madrid en la temporada 2018-19 procedente del Flamengo a cambio de 30 millones de euros. Tras seis temporadas y varias cesiones el brasileño aún no ha encontrado su sitio en la primera plantilla del conjunto blanco.