Los delanteros que más defraudaron a la afición del Atlético de Madrid
Fueron fichados como estrellas o jóvenes promesas, pero resultaron ser un fracaso, ya que no cumplieron con los objetivos previstos, tanto a nivel goleador como de adaptación.
Joao Félix
El portugués dejará de ser futbolista del club madrileño y pondrá punto y final a su aventura en Madrid. Llegó en la temporada 2019-20 tras pagar el Atlético 127 millones y con el cartel de ser una de las grandes promesas del fútbol europeo. En líneas generales, el portugués se marcha sin haber triunfado plenamente en la entidad madrileña.
Jackson Martínez
Uno de los mayores fracasos en la delantera rojiblanca de los últimos tiempos. Jackson Martínez llegó del Oporto como una gran estrella, donde había sido el máximo goleador en las 3 campañas que estuvo. Se marchó del Atlético de Madrid por la puerta de atrás, ya que, a pesar de firmar por 4 temporadas, solo estuvo una en la que marcó 3 goles en 22 partidos que disputó.
Adolfo Valencia
Procedente del Bayern de Múnich fue uno de los peores fichajes del club rojiblanco. Apodado ‘Tren’ por su poderío físico, el delantero colombiano había sido protagonista en la selección de Colombia junto con Higuita y Valderrama. Lo fichó el Bayern de Múnich, donde marcó 15 goles en 34 partidos y en el Mundial 2 goles en 3 partidos, lo que hizo que el Atleti se animara a ficharlo, pero nunca demostró ese nivel en el club rojiblanco, donde solo anotó 6 goles en 24 partidos. Algo que destacó de este jugador fueron las palabras que le dedicó Gil y Gil, entre ellas: “Al negro le corto el cuello. Me cago en la puta madre que parió al negro. Ya estoy harto de aguantar. Cuando no veo actitud me cargo a mi padre”.
Alessio Cerci
El delantero italiano aterrizó en el Atlético de Madrid tras dos buenos años en el Torino. Llegó con el cartel de estrella, pero la realidad es que fue un fracaso, ya que fue un habitual del banquillo colchonero. Desde su llegada las cosas no fueron bien, porque el club colchonero tuvo que pagar de más por su fichaje. Además, llegó pasado de peso y se convirtió en objeto de burlas de la afición, que cada vez que salía a calentar lo alentaba como un ídolo. Él mismo en entrevistas posteriores reconoció que pensaba que con su talento sería suficiente para triunfar y que en el Atleti tenía que trabajar más duro.
Nikola Kalinic
El delantero croata llegó en el verano de 2018 procedente del AC Milan. Solo marcó 4 goles y dio 1 asistencia en las temporadas en las que estuvo. Vino con la intención de ser un complemento para Diego Costa y Griezmann, pero no estuvo a la altura. De hecho, se fue cedido a la Roma, ya que la llegada de Morata en el mercado de invierno le hizo perder protagonismo. Allí demostró una notable mejoría, por ello volvió al club rojiblanco, pero el Cholo no contaba con él, por lo que se fue al Hellas Verona por un precio muy inferior al que había costado.
Luciano Vietto
Llegó en 2015 como una joven promesa ya que su temporada en el Villarreal fue muy buena, anotando 20 goles en 47 partidos, pero en el Atlético de Madrid no cuajó. De hecho, pasó más tiempo cedido que con la camiseta rojiblanca, con la que solo jugó 38 partidos y marcó un gol.
Raúl Jiménez
Procedente del América, el delantero azteca llegó al Atlético de Madrid en 2014 pedido expresamente por Simeone, quien sabía de su potencial y sus características, pero no tuvo muchos minutos, ya sea porque el jugador no se adaptó o porque había mucha competencia en su puesto. Además, no contaba con el cariño de los colchoneros porque antes de llegar al club, Raúl Jiménez se había declarado madridista.
Mateja Kezman
El jugador de Belgrado estaba llamado a ser uno de los mejores delanteros de su época, ya que marcó 129 goles en 4 temporadas el PSV, lo que hizo que clubes como el Chelsea se interesaran por él. Al llegar al Atlético de Madrid fue un fracaso, ya que solo marcó 10 goles y se lesionó, perdiéndose parte de la temporada. Finalmente, el club lo vendió.
Richard Núñez
En el invierno de 2005 el Atlético de Madrid fichó a este delantero urugayo para que se incorporara a las filas del club. Richard Núñez jugaba en el Grashopper suizo, donde se había proclamado 2 veces consecutivas bota de oro, con 26 y 27 goles anotados. Cuando llegó a la Liga española se dio cuenta de que era de un nivel muy superior a la suiza, lo que hizo que no diera lo máximo de sí. Solo disputó 11 partidos, saliendo en su mayoría como suplente.
Roman Kosecki
Procedente del Osasuna, Kosecki llegó al Atlético de Madrid con el objetivo de sustituir a Futre, algo que nunca logró. Su partido más recordado fue contra el Barça, en el que los colchoneros se marcharon perdiendo 0-3 al descanso. Remontaron 4-3, con 2 goles de Kosecki. Seganó la fama de fiestero y se dice que el propio Gil y Gil le sacó de una discoteca.
Rade Bogdanovic
En 1997 el Atlético de Madrid fichó a este delantero desconocido, ya que solo había jugado en las Ligas de Corea y Japón. Jugó 14 partidos, marcó 6 goles y se fue cedido. Tiempo después se descubrió que el club había pagado 17 veces más que el precio que se hizo oficial en un principio.