Unas Pioneras de cine

Una historia de película que al fin llega a la gran pantalla. Pioneras. Solo querían jugar arranca en 1970, en una helada mañana de invierno, con la celebración del primer partido de fútbol femenino organizado por un joven Javier Poga, que queda fascinado por el talento y la pasión de un grupo de chicas muy jóvenes que dejan boquiabierto al público, entre ellas destacan Nati y Belén. El partido será todo un éxito, pero Poga acabará en el cuartelillo... Un film que rememora y sirve de homenaje a las pioneras del fútbol español y a Rafael Muga, organizador de lo acontecido en Madrid un 8 de diciembre de 1970, cuando más de 8.000 personas presenciaron el encuentro entre el Sizam y el Mercacredit (después llamado Olímpico Villaverde), en el Campo de fútbol de Boetticher, situado en el barrio de Villaverde. Un hito que continuó con la celebración del primer partido de la Selección española femenina, entonces clandestina, en La Condomina, Murcia, un 21 de febrero de 1971, y que también se ve reflejado en el largometraje. Aquellas Conchi Amancio, Kubalita, Mari Carmen o Victoria encuentran a su alter ego en el cine a través de las actrices Sofía de Iznájar, Bruna Lucadamo o Nora Otxoteko, que dan vida a ese grupo de mujeres que rompieron barreras en un país todavía bajo la dictadura franquista.

“Pioneras es una historia que no habla solo de fútbol, sino que también habla del camino que la mujer ha tenido que recorrer en todos los ámbitos sociales, ya sea en el profesional, el sentimental o el deportivo”, destaca en su charla con AS Marta Díaz de Lope Díaz, directora de una película épica, costumbrista y reivindicativa. Una mezcla española entre Billy Elliot y Quiero ser como Beckham, con un tono en constante equilibrio entre el drama y la comedia, que emanará ternura y buscará transmitir al espectador una sensación de feel good.

El contexto de esta obra de época adquiere una gran importancia, pues se representa a la España de los años setenta y se enmarca en unas localizaciones protagonizadas por los barrios obreros de las afueras de Madrid y sus campos de fútbol populares. En unas calles a las que llegaban los ecos de Dolores Varga La Terremoto o Jeanette; que son parte imprescindible de una banda sonora que atraviesa al público y le emociona.

“Es fundamental saber de dónde venimos, y ser consciente de lo que ha costado estar donde estamos para seguir avanzando y no dar ni un paso atrás”, afirma Díaz de Lope Díaz, que lejos de sentirse una pionera del cine destaca el papel de sus predecesoras: “Soy de una generación que sí ha tenido la suerte de tener mujeres referentes, en las que mirarse. Desde directoras con más experiencia como Isabel Coixet o Icíar Bollaín, a directoras con grandes trayectorias, pero más cercanas en edad y generación”.

Reparto. Pioneras. solo querían jugar es un proyecto de largometraje de ficción que nace en CINE365 FILMS en 2023, productora madrileña liderada por Jesús Ulled Nadal. Marta Díaz de Lope Díaz y Zebina Guerra, que venían de hacer las películas Mi querida cofradía y Los buenos modales, han escrito la película y dirigido a un reparto de actores y actrices que encabezan Daniel Ibáñez (nominado al Goya por su interpretación en Segundo Premio) en el papel de Javier Poga; Aixa Villagrán (La Virgen Roja o La chica de la nieve) como Edelmira; y Sofía de Iznájar y Bruna Lucadamo, quienes interpretan a Nati y Belén respectivamente, dos de las futbolistas con mayor protagonismo en el film.

Junto a ellas, un reparto joven, talentoso, fresco y lleno de caras nuevas que están arropadas por grandes rostros del cine español como son Pepa Aniorte (Reme), Carmen Flores (Rosa), José Troncoso (Manolo) y Alejandro Casaseca (Ignacio) y la colaboración especial de Carmen Ruiz (Matilde), Elena Irureta (Alicia Laso) y Jordi Sánchez (José Luis Medina).

Marta Díaz de Lope Díaz: “La película hace justicia con nuestras pioneras”

La directora de Pioneras. Solo querían jugar atiende a AS antes del estreno del film con el que rinde homenaje a las primeras mujeres que jugaron al fútbol en España.

—¿Cómo surge la idea de hacer esta película?

—La idea me llegó de la mano del productor, Jesús Ulled, que había leído una noticia en un periódico sobre la inauguración de un polideportivo en homenaje a una de las pioneras del fútbol, Victoria Hernández. Yo no conocía la historia de estas mujeres y rápidamente me puse a buscar información sobre ellas. A cada cosa que encontraba me parecía que había una historia fascinante que contar y, de alguna manera, sacar a la luz.

—¿Encontró pronto respaldo para llevar a cabo el proyecto?

—Sí, desde el principio, tanto Zebina Guerra (coguionista) como yo contamos con el apoyo de los productores desde que empezamos a conceptualizar la historia. Ha sido clave.

—¿Usted tenía relación con el fútbol?

—Cuando era una niña me encantaba el fútbol y recuerdo jugar en el patio del colegio o en la calle. Siempre era la única niña y siempre lo sentí como algo que disfrutaba muchísimo, pero que no era para mí, no era mi lugar. Yo pasaba de los insultos, que los había, y trataba de ignorar esa sensación de estar haciendo algo que no debería. Pero con el tiempo, sin equipos femeninos en Ronda, acabé dejándolo. Así que mi relación con el fútbol es como una espinita clavada que tenía desde pequeña y que, de alguna manera, siento que me he quitado al hacer esta película.

—¿Conoció a las pioneras?

—Sí, Zebina y yo nos entrevistamos con Muga y varias de las pioneras. Fue una suerte poder contar con ellas. Porque fueron unas conversaciones muy interesantes, que nos ayudaron muchísimo a la hora de ponernos a escribir, conocer su punto de vista, cómo lo vivieron.

—¿Fue difícil reflejar las barreras sociales que enfrentaron aquellas mujeres?

—Para mí era muy importante poder reflejar el contexto para poner en valor lo que hicieron y a lo que se estaban enfrentando socialmente. No podemos olvidar que es una historia que sucede en 1970, en una España aún franquista y con la Sección Femenina dictando cómo debía ser una mujer.

—¿Cómo lo vivieron las actrices?

—Desde los castings las actrices comentaban lo mucho que les había impresionado la historia real de las mujeres en las que se inspira la historia. Recuerdo los primeros ensayos y los primeros entrenamientos de fútbol, todas estaban muy comprometidas y motivadas.

—¿Qué siente al poder narrar esta historia?

—Me parece importante contar historias que nos hablen de nuestros referentes, de mujeres en las que mirarnos, que abrieron camino en muchos sentidos, que se enfrentaron a barreras durísimas y que además lo hicieron sin tener ninguna guía, porque eran las primeras. Y me parece que hay algo de justicia en homenajearlas de alguna manera con la película y que la gente conozca su historia.

—Sin caer en spoilers, ¿tiene escena favorita?

—Es una película muy coral y me es muy difícil quedarme con una sola escena. Pero la verdad es que disfruto mucho el primer partido de fútbol, el del Boetticher. Preparando la película me había documentado tanto sobre ese partido, lo había imaginado tantas veces, tenía unas condiciones tan complicadas y concretas, que ahora, al verlo, siempre siento un momento como de orgullo por el increíble trabajo que hizo todo el equipo técnico y artístico.

¿Puede esta película ayudar a seguir rompiendo barreras?

—Sí, creo que es importante que las nuevas generaciones, las niñas de hoy en día, puedan ver este tipo de representaciones. Igual que tienen como referentes a jugadoras como Aitana Bonmatí o Alexia Putellas, también creo que es interesante que en la ficción haya una película que cuente la historia de las que vinieron antes que ellas. Además, Pioneras no habla solo de fútbol, sino del camino que la mujer ha tenido que recorrer en todos los ámbitos sociales.

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