CHAMPIONS (F) | BENFICA - BARCELONA
Pauleta: “El Benfica es algo que llevo dentro″
Paula Domínguez es española y la capitana del Benfica que hoy se mide al Barcelona. La gallega lleva cinco años en Lisboa y se siente una portuguesa más
Paula Domínguez Encinas, ‘Pauleta’ (11 de agosto del 1997) es la capitana del Benfica. La española llegó al club lisboeta hace cinco años, cuando empezó su proyecto con el femenino como uno de los pilares y ya es una referencia dentro y fuera del campo de un club que ha crecido exponencialmente los últimos años. Es uno de los mejores de Portugal, con siete títulos en sólo cinco temporadas, y ya compite en la Champions con los mejores. Pauleta ya sido la encargada de levantar esos trofeos para convertirse en santo y seña del club. Se siente una portuguesa más, allí creció como profesional desde que llegó a Braga con sólo 18 años. La gallega sueña con seguir haciendo más grande al Benfica, el club que le ha cambiado la vida.
-Una gallega en Portugal, ¿cómo es estar en el Benfica?
-Llevo ya cinco años, estoy asentada y habituada a todo. Estoy muy a gusto. Es un club que tiene ambiciones grandes, quiere ser el mejor equipo portugués y empezar a crecer en Europa. Es lo que estamos demostrando los últimos años en Champions. No se crea un equipo competitivo en Champions de la nada y estamos en ese proceso. Busco esa ambición y querer siempre ser mejor. Es lo importante, estar en un club que te de ese proyecto de crecer a nivel nacional como Europeo.
-En Barcelona el conjunto azulgrana os endosó un 9-0 en la primera jornada del grupo, ¿le tienen ganas al Barça después de ese resultado?
-Fue un partido muy duro para nosotras. Salimos a dar lo mejor y salió cruz. Somos más de lo que demostramos en ese partido. Las cosas se torcieron desde el principio y no conseguimos coger el hilo del encuentro. Tenemos ganas de demostrar que en casa somos fuertes, llevamos un recorrido en Champions desde entonces mucho mejor, creciendo, y seguimos aprendiendo lo qué tenemos que hacer para competir, que es lo que queremos. Con ganas de jugar e intentar demostrar lo que realmente es el Benfica.
-¿Fue un accidente?
-Sí, yo creo que sí. El año pasado sólo competimos en fase de grupos y llevamos mucho sin competir en Champions. Tuvimos el playoff, pero la intensidad es diferente. No salimos lo suficientemente enchufadas, como requiere un partido de este tipo. Si no sales enchufadas contra el Barcelona, te meten en el primer minuto y ya vas en contra de todo. El Barça, el haber perdido la final el año pasado, lo pienso por mi, si me pasa, en el primer partido de Champions del año siguiente iría a matar para dar un golpe en la mesa. Creo que se juntó un poco todo y nos salió mal. El fútbol es así, lo bueno es que te da nuevas oportunidades rápido y aquí está. La del Bayern fue una nueva oportunidad y los dos partidos de después también.
-¿Qué aprendisteis en ese partido?
-Salir enchufadas desde el principio, estar intensas y físicamente disponibles es muy importante en Champions. Parece un tópico, pero es así, hay que darlo todo en todos los momentos porque en cualquier despiste te hacen gol y ya vas cuesta arriba. Intentar desde el primer segundo estar activas para que un equipo como el Barcelona no tenga espacios en ningún momento, porque con la calidad que tienen te hacen daño. El fútbol es más que un partido y al final el día fue duro y la noche, pero en dos días ya estábamos entrenando para levantarnos y seguir competiendo. Nosotras tenemos cinco años de historia y el Barcelona años y años. El proceso es así, a veces duele, y duele mucho, pero es así. Tenemos que pasar por el proceso y aprender.
-El Bayern ha demostrado que no es invencible...
-Vimos que el Barcelona, aunque esté mal ,consigue solventar los partido con una cierta calma, pero ante el Bayern se demostró que, entre comillas, son humanas y si se hace bien se les puede ganar. Es un buen ejemplo porque el Bayern quizá no se pensaba que le pudiera hacer frente de esa forma y lo hizo. Sabemos que el fútbol son once contra once y cada partido es un mundo y puede pasar cualquier cosa.
-¿Cómo es la apuesta por el fútbol femenino en el Benfica y en Portugal desde que llegó a hoy?
-El crecimiento está siendo gigante, desde que llegué siento que las cosas cambiaron mucho. Cuando llegué se estaba empezando a fomentar el femenino y ciertos clubes a dar condiciones profesionales. Con la entrada del Benfica se está asentando unas bases y los equipos van entendiendo y aprendiendo. El Benfica es el club más grande de Portugal y está demostrando en el femenino que apuesta por nosotras y quiere un proyecto que tenga éxito a nivel nacional e internacional. La diferencia desde que llegué es gigante, hay mejores condiciones, campos de entrenamiento, cuerpos técnicos y se está haciendo un gran trabajo de formación en las categorías inferiores y que no sea de unos años, que haya unas bases y haya jugadoras de calidad para que Portugal produzca jugadoras de calidad.
-La participación de Portugal en la Eurocopa y la opción de ir al Mundial ayudan, sin duda.
-Sí, y también en el aspecto de la visibilidad favorece mucho al fútbol femenino portugués. Estar en un Europeo o casi ya por entrar por primera vez en un Mundial hace que hay más gente que los ve, a la selección y nuestros partidos. Es importante para que el crecimiento siga aumentando porque la visibilidad es importante para el crecimiento. Cuantas más niñas vea que la selección lucha en grandes campeonatos se va a animar a jugar y eso es importante.
-¿Cómo acaba una gallega de capitana del Benfica?
-Ni yo lo sé. Me surgió la oportunidad de ir al Braga cuando jugaba en el Olivo y no dudé en ir. Por las condiciones, fui a Braga a ver como iba a funcionar y me llamó mucho la atención. Yo, con 18 años, lo que quería era trabajar en un club profesional y me lo daba. Estando allí el Benfica empezó el proyecto, me llamaron y me comentaron que querían, que en unos años estuviera asentado en Portugal y luchando en Europa. Con esa ambición me quede encantada y decidí venir. Lo que me dijeron no era mentira, luchamos por ser el mejor club portugués y por asentarnos en Europa. Fue una serie de sucesos que con trabajo, empeño y dedicación llega. Estando en el Olivo nunca pensé que me llamaría el Braga y después que me llamase el Benfica.
-Ya eres casi portuguesa...
De doce meses del año, once los paso aquí. Algo tiene que haber, es difícil ir a casa, está lejos y al final si no siento esto como mi casa iba a ser más difícil todo. Estoy genial y adaptada y siento a Lisboa y Portugal como mi casa y mi país.
-¿Se plantea ir a la selección portuguesa si le llamaran?
-Es un proceso que hay que hacer con unos determinados años que hay que pasar aquí, después el papeleo... pero sin duda, si puedo colaborar con Portugal y agradecer lo que los clubes y la Federación portuguesa hicieron por mí, si es en el campo que es lo que mejor sé hacer, lo haré. Al final llevo siete años aquí y Portugal fue quien me dio la oportunidad de ser profesional y a día de hoy me da las condiciones para vivir y crecer como jugadora. Por en medio hay unos obstáculos burocráticos que hay que pasar todavía.
-¿Volverá a España?
-No lo sé. El tiempo dirá. Aquí estoy muy bien, no pienso en moverme ni a España ni a ningún país. Para mí lo importante es estar a gusto en el club y tener éxito y buscar ser ambicioso. El Benfica me da todo eso. Aquí me siento querida y bien, con la gente me siento muy bien y se suma un proyecto ambicioso y que quiere siempre más. Nunca se puede decir que no a nada, pero ahora en el Benfica me siento en sintonía con la afición y el club.
-¿Se imaginaba que llegaría a ser capitana de un club tan importante como el Benfica cuando partió a Portugal?
-No. A veces lo pienso y recuerdo que estuve cuatro años en el Olivo, el último año que perdimos en la fase de ascenso a Primera y de repente de la nada llega esta posibilidad para el Braga. En ese momento no te das cuenta muy bien de lo que estas haciendo. Después me fui sola a un país nuevo, con cuatro compañeras del Olivo, pero se fueron las cuatro y me quede sola allí. Fue un seguimiento de sucesos que me llevan ahora a estar aquí. Miro para atrás y digo ‘quién me lo iba a decir’. De pequeña decía que quería ser futbolista profesional, pero me dicen con 16 que voy a ser capitana del Benfica y competir con las mejores en Europa, me río y no me lo creo. La vida es así y nos da estos regalos, trabajados, pero regalos que hay que aprovecharlos al máximo
-¿Quién es tu referente?
-Vero Boquete. Es gallega y cuando empecé a un nivel un poco más alto, que empecé en el Olivo ella estaba en el auge. Es una jugadora que pasó por muchos sitios, de calidad con carácter y personalidad que eso me gusta. Jugadoras que sumen y les guste coger el balón y asumir el juego. Y por los valores que transmite fuera del campo.
-¿Qué retos se pone en su carrera?
-Mi mayor reto es llevar al Benfica más lejos en Champions y quien sabe si competir en cuartos o semifinales. Es algo que llevo dentro, porque llevo aquí desde el inicio del proyecto y entiendo como todos quieren hacer las cosas. La ambición es muy grande y se siente mucho el fútbol. Va más allá de lo deportiva, es algo personal. Es algo que queremos mucho y como capitana me gustaría convertirla y llevar al Benfica cada día más lejos.