Cambio de planes con Montse Tomé

España cierra la ventana de selecciones con buen sabor de boca y en paz, algo que parecía imposible hace unos días. Más concretamente, hace nueve días cuando salió a la luz la lista de convocadas de La Roja. Bombazo, ya que estaban incluidas las jugadoras que días antes habían pedido mediante un comunicado no ser llamadas.

El paso al frente dado por la RFEF fue difícil, pero el tiempo les ha dado la razón. Las campeonas del mundo y algunas de ‘las 15′ regresaron y, tras reuniones, se han logrado sentar las bases y ya mirar al futuro. Y en ese futuro de la Selección entra Montse Tomé.

No fue una cosa fácil. La tensión se sucedió durante los primeros días de concentración. Con pasos adelante en las peticiones se fue relajando el ambiente. Lo que parecía un callejón sin salida para Tomé, tras largas charlas con las internacionales, fue destensándose. Uno de los puntos en los que incidió la entrenadora fue en la confianza. “Estoy del lado de ellas, apoyo a Jenni, siento lo que ha pasado. No me sentí bien tras los aplausos en la asamblea...”, fueron algunas frases pronunciadas por la asturiana que han calado en el vestuario.

Se abrió en canal con las 23 por todo lo ocurrido. Otra de las vías que cogió fue la de devolver los galones a las que hace un año lo perdieron todo. Capitanía para Irene Paredes y Alexia Putellas. Capacidad de decisión para ellas y, en representación, para el resto de las convocadas.

La RFEF quería pedir a las jugadoras un voto de confianza con la nueva seleccionadora. Que le dieran tiempo y le dejen trabajar. Si no funcionaba, se iría. Pero la cosa fue sobre ruedas. La asturiana sentó sus propias bases, primero en el complicado duelo en Gotemburgo. Ante Suecia se sufrió, pero se solventó el partido y se lograron los decisivos tres puntos.

Primer paso adelante de la entrenadora. Con el vestuario más cerca -tras ese triunfo fueron varias las que la fueron a buscar al final para que se uniera a la celebración mientras ella esperaba tímida en la banda- el resto llegó rodado. Fiesta y partidazo en Córdoba. Ante Suiza volvió a tocar piezas y se llevó un sobresaliente.

Cambio total

En tierras andaluzas, Montse ya estaba dentro del grupo durante la celebración. Se vieron abrazos con varias internacionales en el césped del Nuevo Arcángel. “Está todo bien, al principio fue todo un poco extraño. Raro por cómo se dio la convocatoria. Pero las cosas pasan, nos hemos quedado y cuando te quedas hay que asumir toda la responsabilidad que tienes. Ya trabajamos para ganar”, admitió Aitana tras el choque.

Athenea refrendó esto. “Nos ha transmitido muchísima confianza y tranquilidad. Tuve la oportunidad de coincidir con ella en unas convocatorias antes del Mundial Sub-20 y me gustó muchísimo los conceptos y la forma de expresarse que tenía. Aquí también me está gustando, eso es algo positivo”, afirmó la cántabra. “Las sensaciones son muy buenas, se ve el rollo que hemos tenido”, añadió Maite Oroz.

Montse cierra la primera convocatoria de su carrera como seleccionadora con todos los fuegos apagados. El de los conflictos, ya que ella es la primera que se ha puesto del lado de sus jugadoras. Y el deportivo, donde ya no hay dudas sobre sus capacidades. España camina con paso firme y con las bases asentadas. Montse respira tranquila.