Lola Romero: “Queríamos una persona ganadora y Cano lo es”

En sus más de veinte años de historia el Atlético siempre ha tenido a la misma mujer al frente: Lola Romero (Río de Janeiro, 1966). Alma máter del equipo rojiblanco femenino, la hoy directora general se muestra convencida en AS de que las suyas, ahora con Manolo Cano a los mandos, cumplirán con un objetivo que la dirigente marca como una obligación: jugar Champions. De hecho, el nuevo entrenador colchonero ha firmado hasta final de temporada con una cláusula de renovación automática si lo consigue...

—¿Cómo está el equipo?

—Bien, las veo con muchas ganas. La llegada de Manolo Cano ha sido un aire fresco, que creo que era necesario. Están muy enchufadas. Son profesionales y el cambio de entrenador tiene que ser también una motivación para ellas.

—¿Por qué él?

—Le conocemos de hace tiempo. Hace cuatro años ya nos fijamos en él y no entró por circunstancias. Es una persona de la casa, la conoce y sabe lo que es ganar y triunfar aquí. Queríamos una persona ganadora y él lo es. Ha calado muy bien en el vestuario desde que llegó. Estoy convencida de que hemos acertado. Tiene renovación automática si consigue el objetivo de entrar en Champions.

—Una nueva apuesta por alguien ajeno al femenino...

—Menos Óscar Fernández, todos los que hemos tenido antes han sido así también: Sánchez Vera, Villacampa, Núñez... No tiene por qué tener experiencia en fútbol femenino. Si le da a las jugadoras lo que necesitan en lo personal y lo anímico y técnica y tácticamente funciona bien, da igual que sea de masculino o femenino. Manolo nos ha transmitido que esto es una ilusión enorme para él y eso nos agrada. Hay gente que viene de fuera y llegan enganchados, por lo que algo estaremos haciendo bien en la categoría para que quieran estar en Primera Femenina.

—¿Cuánto dolió la derrota en el derbi que acabó con la salida de Óscar Fernández?

—Dolió, dolió mucho... A toda persona que lleve este escudo le tiene que doler jugar contra el Real Madrid y perder. Además de la forma que perdimos, hicimos un grandísimo partido. Nos falló el final, terminar de otra forma.

—¿Le faltó ambición?

—No sé si fue ambición, yo no soy quién para categorizar a nadie. Es verdad que, de alguna manera, echamos de menos ir a por el partido. Las teníamos suficientemente encerradas como para poder conseguir la victoria y se nos fue. Al final da igual, no lo hicimos bien y ya está.

—Esta temporada no han ganado a ningún rival directo por Europa...

—El único fue al Athletic, en Lezama. Es verdad que con los de arriba hemos estado ahí, ahí. Un empate con la Real Sociedad en casa no sirve, el partido contra el Madrid CFF que le sigue... Con esos rivales directos tienes que ir a por ellos. Pero no hay que mirar atrás. Estamos contentos de que el cambio nos va a dar muchas cosas. El club se vuelca para que estemos en Champions, es una obligación.

—¿Llega a obsesión?

—Lo malo que tienen las obsesiones es que igual te bloquean. Eso nos pasó la temporada pasada. Había momentos en los que teníamos tanta tensión que no nos salía nada. Le ha pasado también al masculino cuando tenía que marcar y fallaba lo imposible. Evidentemente necesitamos entrar en Champions, pero hay que quitarse la presión e intentar disfrutar.

—Son cinco cambios de técnico en cuatro temporadas, ¿falta estabilidad?

—Lo que pasa es que a veces la estabilidad la intentas encontrar en el día a día. Considero que lo más importante en la vida es no relajarse, no mirar para otro lado... Lo que somos es valientes. Daremos con la tecla, estoy convencida.

—También hubo cambios significativos en la plantilla...

—Ha sido un año convulso, pero al final estás encontrando el sitio que merece el Atlético. Siempre que hay cambios, algo cae. Se ha roto el romanticismo de tener a Amanda siempre, de Mesi (Silvia Meseguer), las capitanas... Pero insisto en que seguramente sean cambios necesarios. Por encima de las personas o de los entrenadores, está el club. Volveremos, estoy convencida.

—¿Cómo funciona el Atleti a la hora de planificar la temporada?

—Hace dos años nos dimos cuenta de que María Vargas, directora deportiva, estaba muy sola. Había logrado todos los éxitos, pero necesitaba ayuda, brazos derechos. Se amplió el departamento de captación y ahora estamos trabajando con Roberto (Ricobaldi), con Andrés (García) y estamos muy contentas. Se refleja en los fichajes de este año, que los hicimos pronto, adelantándonos a muchos clubes. Ahora hay muchos medios para ver jugadoras, antes había muchos fichajes que prácticamente los recomendaba un agente... Tenemos claro que tenemos que seguir creciendo y estoy convencida de que llegaremos a alzar los títulos gracias a esto. Hay una plantilla espectacular.

—El Barcelona ha subido su presupuesto hasta los 12M€, el Real Madrid, a 6, ¿y el Atleti?

—El año pasado no entramos en Champions y el presupuesto aumentó. El anterior tampoco, y también aumentó. El club está volcado y lo que pide son resultados.

—Beatriz Álvarez habló de incentivos para la apertura de estadios, ¿cuál es?

—Ellos apoyan a los clubes con una cantidad económica para abrirlos, no sufraga los gastos, pero es un apoyo. Son 15.000 euros, mínimo, por temporada y luego hay una partida dependiendo de lo que se haya hecho a nivel de marketing, comunicación... Pero en definitiva a lo que aspiramos es a esto: a que un fin de semana la afición venga a ver al femenino y otro, al masculino.

—¿Cómo está Virginia?

—Bien, ella sabe que tiene que ir poco a poco. Estoy convencida de que nos va a seguir demostrando cosas. Quizá le falte ese punch de la competición todavía, pero surgirá. Para nosotros es una más. Ella, de hecho, nos pidió que nos olvidáramos del resto y que la consideráramos una más, una deportista y una profesional. Por eso en un momento dado si no estás, no juegas. Si estás, sí. El día que la veamos jugar 45 o 70 minutos será porque se lo ha ganado. Eso será lo más bonito.

—¿Siguen anhelando el regreso de Jenni Hermoso?

—Estuvo a dos días de prácticamente firmar, pero entró el Pachuca en juego y nos quitó esa ilusión. Ellos la han firmado por dos temporadas, con lo cual hay que respetar los contratos. Se la ve mucho con nosotros porque es una persona que se ha criado aquí. De hecho, en Navidad nos pidió entrenar aquí cuando tuviera descanso.

—¿Un deseo para 2023?

—Seguir creciendo y estar en Champions.