La maldición de La Roja
España pierde a Alexia y hace unos días a Jenni y Salma. El 14 de Torrecilla se queda huérfano. Alguien luchará por romper el maleficio.
La lesión de gravedad de Alexia Putellas, la mejor jugadora del mundo, antes del comienzo de la Eurocopa, ha sido un golpe duro para la Selección. Últimamente este equipo está sufriendo varapalos con algunas de sus jugadoras más importantes. El último ha sido el de la Balón de Oro, pero antes fueron Jenni Hermoso y Salma Paralluelo. Ambas se quedaron sin el sueño de la Euro debido a sufrir lesiones que les impedían llegar a tiempo para disputar el torneo continental por excelencia.
La delantera del Barcelona es el caso más destacado. Es el gol de España. Cuando se supo que el torneo de retrasaba un año por el COVID fue la primera en lamentarse. Llegaba con 32, tenía dudas. Y finalmente esas dudas se convirtieron en realidad. Una pena. Sin embargo, la madrileña aún sueña con estar en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda del verano de 2023. Es su última bala.
La maldición del 14
Hay un antecedente que es el de Virginia Torrecilla. La balear fue una de las mejores jugadoras en el Mundial de Francia. Se salió. Dio auténticos recitales llevando el peso del juego desde el centro del campo. La brújula de La Roja, anulando a selecciones como Estados Unidos.
Pero la vida la privó de seguir esa línea ascendente. En mayo de 2020 se le fue diagnosticado un tumor cerebral, lo que le apartó de su pasión, el fútbol. Ese 14 que vestía en la Selección lo quiso heredar Alexia (antes Lucía el 11), en homenaje a su compañera y amiga. En la Eurocopa de Inglaterra, ese 14 se ve huérfano.
Sin Alexia y sin Torrecilla, dos insignias del fútbol femenino español. Alguien tomará el testigo y luchará por romper el maleficio y llevar a España a lo más alto en el continente. Os esperamos de vuelta a todas, luchadoras.