¡Jenni, no te vayas nunca!

Jenni Hermoso. No podía ser otra. La madrileña salvó a su selección en el minuto 89′ cuando no le entraba el gol a La Roja. Era el regreso ideal de España, con Jenni de nuevo y con la paz establecida en la concentración. Y la fiesta se completó con ese remate de Jenni, la Jenni de España, que incluso se emocionó tras mandar el esférico al fondo de la red.

Montse no quería sorpresas, por eso puso a todo su arsenal sobre el césped de Salerno. La portería de nuevo para Cata Coll, en la zaga la pareja de Laia con Ona y Olga. El centro del campo indiscutible ya. Y en la delantera con Esther, en su regreso, de referencia. Ya se ve el toque que quiere dejar la asturiana, y una de esas novedades es la confianza que tiene en Lucía. España salió directa, con las cosas claras, a por los tres puntos. La que cogió la batuta esta vez es Aitana Bonmatí. La del Barcelona, ya que huele el Balón de Oro, fue la primera en probar a la guardameta italiana. Y sin dejar respirar a las Azurras se regateó en el área a dos defensoras para golpear con contundencia. Una lástima que Giullani hiciera la parada de su vida. Iba a ser un golazo.

La Roja no se achantó, ni mucho menos, había ocasiones de todos los colores. Esther, Mariona, Lucía, Alexia. Era un vendaval como el que pasó unas horas antes por la ciudad del sur de Italia. Y aunque eran pocos, el grupo de aficionados españoles no dejaban de alentar a las españolas a ritmo de “campeonas, campeonas”. Los locales se vinieron arriba tras una ocasión de Linari que solventó Cata con su seguridad habitual. El ritmo bajó de intensidad, había que atacar, pero con cautela. No sería por Montse, que no paraba de dar indicaciones desde la banda. Sabía de la importancia de este choque, no se podía encallar su camino en la Nations League, mantener el liderato era fundamental.

Aleixandri fue una de las que decidió adelantar líneas con su salida de balón y así se originó una gran jugada de España que se cerró con un regate marca de la casa de Aitana. El esférico iba directo a portería, pero en medio se puso una defensora italiana. España comenzaba a perdonar ante una Italia que ni siquiera lo intentaba. Cuando despegaba era por un fallo del equipo español, un poco más impreciso de lo habitual en el centro del campo. Ni a Alexia le salían las faltas, en los corners se molestaban.

Tras el descanso Montse no se lo pensó y sacó más artillería: Salma y Athenea para reforzar el ataque. Y fue la zaragozana la que tuvo la ocasión más clara del partido tras un centro de Olga medido al área que no remató bien Salma. No llegaba el gol, pero España parecía otra. Apresurada, con nervios, pero otra. Y le tocó el turno a Jenni, otra más para romper el muro italiano. Con Salma ya desplazada a la izquierda llegó otra gran oportunidad de la del Barça. Olga, por esa misma banda, estuvo a punto de sorprender con un centro-chut.

España no se rindió, y sirvió. Fue en el minuto 89′ cuando tras varios rechaces llegó el gol de Jenni. España se marcha de Salerno con un sabor inmejorable. Con Jenni y toda La Roja brillando, luciendo la estrella de campeonas del mundo como solo ellas saben hacer.

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