LIGA F | ÁLVAREZ MESA | 1ª parte

Álvarez: “No hay mensaje de tranquilidad, esperamos a la siguiente zancadilla”

Beatriz Álvarez Mesa recibe a AS en la sede de la Liga F para analizar la última resolución del CSD, la cual les ha provocado una “preocupación muy grande”. Este viernes, la segunda parte.

JESUS ALVAREZ ORIHUELADIARIO AS

Ante la ausencia de un convenio de coordinación entre la Liga Profesional de Fútbol Femenino (LPFF), bautizada como Liga F, y la RFEF, el CSD resolvió el pasado 29 de junio un marco regulador de las competencias de ambos antes que ha provocado una “preocupación muy grande” en la patronal. Así lo afirma la presidenta de la patronal, Beatriz Álvarez Mesa, que recibe a AS en su recién estrenada sede en la calle Fortuny. El “desmesurado” aumento de los gastos que supone esta resolución, como los 3.515.080 euros en arbitraje por temporada, hace que la dirigente señale directamente al actual Gobierno de Pedro Sánchez: “No se entiende qué interés puede tener el Gobierno de intentar asfixiar un proyecto que crearon ellos”. Este viernes, la segunda parte de la entrevista en AS, donde habla de Finetwork, el convenio o el Caso Alhama...

—¿Cómo está tras la resolución del CSD?

—Nos ha dejado realmente preocupados por la nueva situación que se está produciendo o que se puede producir. Evidentemente la ley dota de potestad al CSD para hacerlo ante la ausencia de un convenio de coordinación... Pero se han incorporado determinadas cuestiones que entendemos que dependen de la voluntad de las partes; en ningún caso creemos que un gobierno tenga que meterse a regular determinadas cosas que no tienen nada que ver con la necesidad o los puntos fundamentales de organización de una competición. Son decisiones que pueden beneficiar o perjudicar a cada una de las partes y que nada no tiene nada que ver con la organización.

—¿Qué cuestiones les hacen más daño?

—Hay cuatro cosas que nos llaman especialmente la atención. Una es el concepto de solidaridad que se aplica... Esto además se lo he dicho al secretario de Estado en presencia de Luis Rubiales. El concepto universal de solidaridad, entendemos que siempre tiene que ser del que más tiene al que menos o del que es más poderoso al más desfavorecido. Esto se entiende muy bien haciendo una analogía con el fútbol masculino, que LaLiga dote de determinados recursos al fútbol base masculino, a la RFEF, y que a través de su convenio ya han llegado a sus acuerdos y negocian ahí determinados conceptos. Sin embargo, en una Liga Profesional de Fútbol Femenino en la que llevamos apenas un año de andadura, que tenemos los recursos que tenemos y los ingresos, tanto por la parte comercial como audiovisual, que se nos trate de ahogar, cuando generamos muchísimo menos dinero que la RFEF, que se que se autodenominaba la segunda federación más rica de Europa y que tiene un superávit de 28 millones de euros... No es un problema de dinero para ellos...

Sin embargo, para nosotros sí que es una asfixia y un ahogo y pone en riesgo, lógicamente, la sostenibilidad de la competición. Una competición que, por cierto, todavía está, en parte, subvencionada por el CSD —el órgano dio 5M€ en 2022, 7M€ en 2023 y otros 18M€ a clubes para la mejora de infraestructuras— precisamente para ayudar a esa sostenibilidad. Resulta contradictorio. Por un lado, nos están dando dinero para subvencionar este proyecto y, por otro, nos están obligando a dar una cuantía mayor de la subvención que nos dan a un tercero que es la RFEF, tanto por el 20% de los ingresos comerciales que nos obligan a darles como por el incremento de todos los gastos federativos de este año de una forma totalmente desmesurada.

—¿Lo dice por los 14.646′17 euros por partido?

—Ha sido un disparate desde el inicio el tema arbitral. Al final esto fue una medida de presión, aunque creo que lo único que compartíamos todos desde el inicio era que las árbitras tenía que mejorar sus condiciones económicas. Pero más allá de eso, luego hubo muchas discrepancias en el incremento de los gastos de desplazamiento, de formación, que son directamente costes de la Federación... Supusieron un incremento tan exagerado respecto al año anterior, ofreciéndonos el mismo servicio que cuando la Liga no era profesional, que se explica un poco difícil. De alguna manera el Gobierno forzó ese acuerdo cuando intervino y nosotros aceptamos con la condición de que a los clubes únicamente se les facturaran los honorarios arbitrales, tal y como ocurre con el masculino, y que todos los gastos relacionados con desplazamientos, con la formación, las dietas y estos conceptos, nos lo factura la RFEF a la Liga para no ahogar y asfixiar a los clubes. Esto, que está naturalizado desde hace muchos años en el masculino y está acordado por ambas entidades, parece ser que no lo vieron bien para nosotras.

Pero lo grave no es que la RFEF prefiera hacer una única factura a los clubes, es que el Gobierno ha defendido esa postura. Lo dictan en la resolución. Además, están otras dos cuestiones, que ya no son económicas sino de concepto. Una, nos hace perder la autonomía absoluta al impedirnos llegar a acuerdos con terceros sin autorización de la RFEF: esto está totalmente orientado hacia el acuerdo que tenemos con LaLiga. Y la otra, que tiene más que ver con la discriminación hacia la mujer y se lo manifestamos en la reunión al secretario de Estado. Estos son los artículos que hacen referencia a que la Liga Profesional de fútbol femenino acatará las decisiones que se tomen respecto a la Liga Profesional de fútbol masculino y la RFEF en cuanto a temas disciplinarios. Es decir, hay dos artículos en donde nos dicen que las mujeres, nosotras, tendremos que acatar lo que decidan Javier Tebas y Rubiales. ¿Igual tenemos que acatarlo porque sabemos menos o por qué? No termino de entenderlo. Creo que tiene que haber un respeto institucional.

“Hay dos artículos en donde nos dicen que las mujeres, nosotras, tendremos que acatar lo que decidan Javier Tebas y Rubiales”

Beatriz Álvarez Mesa, presidenta de la Liga F

—No se parte de una igualdad, ¿pero sí se aplican las mismas sanciones o gastos?

—Ni se parte de una situación igualitaria ni ha habido proporcionalidad ni analogía con el masculino, tal y como defendió el ministro (Miquel Iceta) en la reunión que tuvimos con él. Porque ayer el secretario de Estado hacía unas declaraciones en donde decía que los ingresos comerciales, el porcentaje del 20% que tenemos que dar a la Federación era proporcional a lo que ocurría en el convenio de coordinación del masculino. A mí me gustaría que el secretario de Estado lo revisará de nuevo. Para empezar no existe ningún porcentaje, existen distintos conceptos y distintas cantidades, pero no por porcentaje y si quisiéramos hacer el porcentaje del dinero que LaLiga le da a la RFEF por todos los conceptos y el porcentaje respecto a los ingresos comerciales, estaríamos en menos de la mitad de lo que nos ha aplicado a nosotros.

Le invito a que haga la suma y el porcentaje porque nos parece un agravio. Si nos vamos al porcentaje que de la ACB a su Federación también está muy por debajo. Las Ligas están muy preocupadas y nos apoyan en esta resolución porque puede generar un problema para todas. Si te vas a otras ligas como Australia, Suecia, Escocia, Japón, donde hay Ligas con asociaciones de clubes, todas se llevan las manos a la cabeza. En ninguna de ellas el fútbol femenino le da a la federación, sino que la federación impulsa el fútbol femenino.

—Sabiendo que deben dar un porcentaje al fútbol base, ¿cuál verían justo?

—Solo hay un porcentaje que está regulado por Ley y es el 2% de los derechos audiovisuales que LaLiga da a la Federación, por ejemplo. Podría aplicarse decir: pues vamos a hacer una analogía con el Real Decreto 5/2015 y aplicar ese 2% en ausencia de un decreto que regule el reparto del fútbol femenino, que todavía no existe. Se puede entender, hay un soporte detrás. Nosotros lo que le trasladábamos era que, con independencia de que no tuviéramos el mismo concepto de solidaridad, si tuviéramos que dar un porcentaje a la RFEF lo que tratábamos de trasladar era que que en los primeros años de vida, que estamos incluso subvencionados, que no nos quitaran dinero, que no nos quitaran ingresos. Cuando seamos capaces de generar X, entonces podremos volcarlo en el fútbol base, pero sacarse de la manga cualquier porcentaje y que sea un 20% nos parece muy grave.

—¿Esa posibilidad de veto de la RFEF a sus acuerdos pone en peligro el firmado con LaLiga?

—Esta resolución es posterior a cuando lo firmamos y no aplicaría, pero es la sensación de control, del control sobre la mujer. Porque esto nunca lo hubieran hecho sobre LaLiga masculina. Sería implantable. Lo hacen porque somos nosotras y porque parece que tienen que ejercer un control. Allí lo dijo la RFEF “nos habéis quitado el control de la Liga y encima les subvencionáis”. No sé si hay una necesidad de contentar al que siente que se le ha quitado algo, o qué es lo que ocurre, para que quieran ejercer un control que hasta ahora no existía y que solo aplican al femenino.

—¿Por qué la resolución llega ahora?

—Nosotros en la visita al ministro le hablamos de una fecha, el 30 de junio, que es la fecha que normalmente la RFEF marca para la inscripción, como la temporada pasada, por ejemplo. Ahí tienen que estar saldadas las cuentas con los gastos federativos. Les dijimos que si iban a resolver las cuestiones planteadas lo ideal sería que fuera antes del 30 de junio. Es cierto que la RFEF este año amplió el plazo y va a ser hasta el 17 de de julio, pero nosotros fuimos los que marcamos el 30 de junio. No por presionar al Gobierno. Pero la decisión de haberlo hecho antes de las elecciones entiendo que también tenga que ver con una estrategia propia de tratar de solucionar algo que no hemos hecho durante este año.

La LPFF ha presentado un recurso de reposición sobre la resolución del CSD

—¿Ven posible un cambio posterior sobre esta resolución?

—Yo he vuelto a escribir al ministro pidiéndole, por favor, que le informaran bien de esa resolución, que las conclusiones que él sacó con respecto a analogía y proporcionalidad no se daban. Además de dar voz al malestar de los clubes, a la incomprensión que tienen los clubes, tanto los independientes que se encuentran asfixiados, como los clubes de LaLiga, que no entienden este ahorcamiento al fútbol femenino. No se entiende qué interés puede tener el Gobierno de intentar asfixiar un proyecto que crearon ellos, que denominaron su proyecto de país y que tenía que ser la tracción del resto del deportes practicado por mujeres. No obstante, vamos a dar posibilidad a este Gobierno, al de ahora, que legalmente tenga la herramienta de poder darle una vuelta a este convenio. Hemos hecho un recurso de reposición, en el que ellos podrían cambiar el sentido o alguno de los sentidos de esta resolución. No sabemos cuál va a ser la decisión de este Gobierno ni del que venga, sean estos o de otro grupo político. No sabemos qué es lo que va a ocurrir, lo que sí sabemos es que cuando se hace una apuesta por un proyecto no puede quedarse en palabras o fotos, sino hechos.

—¿Es insalvable la relación entre Liga F y RFEF para que llegue ese convenio de coordinación?

—Es muy difícil llegar a entendimientos cuando alguien no está dispuesto a ceder en nada. Un convenio es una voluntad de las partes, donde das y recibes, y tienes que tener empatía y sensibilidad con el de enfrente. Empatía no sentí desde el principio porque, como sabes, no me dejaron ya sentarme de primeras por videoconferencia porque era necesariamente presencial y acababa de ser madre... No había voluntad desde el momento en que lo tuyo también es nuestro, con lo cual no te damos herramientas para que puedas negociar nada. No tienes nada que darme. Y lógicamente, un convenio no es un sometimiento. Nunca hemos podido llegar a consensos. Todo se va haciendo más complejo y más feo cada vez.

“No sé si van a parar, pero nosotras tampoco vamos a parar ni nos vamos a callar”

Álvarez Mesa, presidenta de la Liga F

—Hay evidente preocupación en los clubes, ¿puede darles hoy día un mensaje de tranquilidad?

—No tenemos ningún mensaje de tranquilidad porque estamos siempre esperando cuál va a ser la siguiente zancadilla o barrera. ¿Qué va a ser lo siguiente que permita el Gobierno? Porque es un poco la sensación permanente que hemos tenido este año. El calendario, el sorteo, las árbitras, la entrega del trofeo... Que se supone que es un activo comercial y se hace una reinterpretación de la resolución del secretario de Estado para que pueda dar el trofeo el presidente de la RFEF. Han sido tantas cosas, raras y siempre en contra que al final evidentemente hay una preocupación muy grande. Y los independientes no son los únicos que tienen problemas. Las licencias, las sanciones, las inscripciones, es decir, hay una desproporcionalidad de los gastos con respecto a la industria del fútbol femenino. Nos están ahogando con los gastos.

—¿Por qué?

—Pues para demostrar que aquel informe desfavorable que emitieron a la Comisión Directiva del CSD para que no hubiera Liga profesional les dé la razón: para decir que no están preparadas. No sé si van a parar, pero nosotras tampoco vamos a parar ni nos vamos a callar.

—¿Intentarán dar el trofeo de Liga el año que viene?

—Hay una resolución clara del CSD en donde dice que los activos comerciales serán competencia del organizador de la competición, que es la Liga Profesional de Fútbol Femenino, y además menciona a modo ejemplo varios de ellos, como el nombre de la competición, el balón o el trofeo. Si esos son activos y son competencia de la Liga, ¿qué sentido tiene cuando hay que hacer la entrega del trofeo que se nos prive de ese activo? Es decir, de hacer una entrega de trofeo con todos nuestros patrocinadores. Se hace una reinterpretación de eso, diciendo que una cosa era el trofeo y otra la entrega, y que podían hacerlo ellos, pero sin exhibir sus patrocinadores.

Beatriz Álvarez Mesa posa para AS en la sede de la Liga F en Madrid.JESUS ALVAREZ ORIHUELADIARIO AS

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