Alba Redondo: “He trabajado mucho la cabeza”

A Alba Redondo (Albacete, 1996), delantera del Levante, hay que escucharla con la misma atención que cuando se vigilan sus movimientos en el campo: “Si no te va la cabeza, lo demás tampoco”. En el mejor momento de su carrera deportiva, en una temporada en la que ha marcado 24 goles en 26 partidos de la Finetwork Liga F, la delantera manchega atiende a AS con la confianza de que el equipo granota, tercero en la tabla, logrará la clasificación para la próxima Champions y el deseo de estar en el Mundial: “Es un sueño desde pequeña”. Con la carrera de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte en el bolsillo, sabe que su futuro seguirá estando ligado al deporte...

—¿Cómo están tras la derrota ante el Atlético?

—Bien, bien... Demostramos, a pesar de caer derrotadas ante un gran equipo, que estamos con confianza. Para nada estamos decaídas, sabemos lo que queda y sólo nos queda apretar porque aquí nadie regala nada.

—Decía su entrenador que no hay presión porque tienen ventaja...

—Nosotras miramos la clasificación, vemos la distancia que hay y en ese sentido estamos tranquilas. Pero esto es fútbol. En un rato estás arriba y en otro, abajo. Hay que ser conscientes de que, por mucho a favor que llevemos, las cosas también se pueden torcer. Pero nosotras haremos todo lo posible para materializarlo todo cuanto antes.

—¿Con la clasificación a Champions?

—Materializarla mejorando con respecto al año pasado. Y si se puede entrar en Champions, pues qué maravilla.

—A nivel individual, lleva 24 goles, ¿siente que marca todo?

—(Se ríe) A nivel profesional es una de las mejores temporadas de mi carrera deportiva. Estoy feliz y estoy bien rodeada. Al final, cuando tienes un equipo profesional detrás de ti que te ayuda a ser mejor jugadora, las compañeras, un entorno estable... Tienes mucho a tu favor. Solo puedo resumirte que en mi vida, desde hace bastante tiempo, estoy muy muy feliz.

—¿Ha trabajado también algún aspecto específicamente?

—Nunca puedes dejar de trabajar. Tienes que marcarte bien los tiempos porque mucho es malo y poco, también. Es necesario un equilibrio. Yo he trabajado mucho la cabeza. Muchas veces me metía más presión de la que tenía y no era necesaria y me bloqueaba. Lo he dicho y lo seguiré diciendo: si no te va la cabeza, lo demás tampoco. Eso es un trabajo fuera, y luego también lo físico y específico de delantera. Parecerá una tontería, pero como cuando en Oliver y Benji Oliver se iba a tirarse 20 balones... Eso también lo he hecho y hace.

—En lo colectivo, ¿esperaban una temporada tan buena?

—Nosotras empezamos la temporada con mucha ilusión: jugadoras nuevas, entrenador nuevo... Al final se ha dado todo así y ha sido maravilloso. Sabíamos que iba a ser difícil, nos hemos apoyado unas a otras, confiado en el entrenador y al final los resultados están saliendo y queda materializarla...

—¿Qué destacaría de esa línea de ataque del Levante que está arrasando?

—Cada una de nosotras es diferente y lo que aporta hace más grande al equipo. Aunque destacaría por encima de todo su profesionalidad. De Mayra, la velocidad, esa fuerza y potencia que tiene, que nos da mucho juego de cara. Érika es master class. Cuando tenga más experiencia en Primera va a ser como Xavi o Iniesta, su calidad y ese último pase. Andonova, la zurdita de oro. La pequeña suma de cada una de nosotras hace que estemos donde estemos.

—¿Tienen la espinita de la eliminación copera?

—Espinita se nos quedó en su momento, pero seguir pensando en eso es equivocarse. Queremos materializar ya la Liga y disfrutar de los partidos que nos quedan. Hay que disfrutar hasta cada entrenamiento como si fuera el último.

—En Liga les toca viajar a Tenerife, el Granadilla, ¿campo complicado?

—Sabemos que su campo es determinante para ellas y nosotras tenemos que ser muy serias, disputar cada balón como si fuera el último y salir desde el minuto uno a comernos, literalmente, el césped.

—¿Qué les ha aportado Sánchez Vera?

—Sobre todo mucha madurez futbolística, interpretar situaciones, momentos, mucho juego táctico...

—Tiene contrato hasta 2024, ¿tiene alguna inquietud fuera a largo plazo?

—El único plan que tengo es poder meter al Levante en Champions porque se lo merece. Solo pienso en acabar la Liga lo mejor posible y vestir la camiseta del Levante, ya veremos qué pasa en unos años, pero de momento disfruto aquí.

—En el horizonte sí está el Mundial, ¿se emociona imaginarse allí?

—Me emociona porque es un sueño desde pequeña. Un Mundial es el escaparate mayor que hay en el fútbol. Lo viven muy pocas personas y a mí me encantaría. Veremos cómo transcurre todo.

—Cuando empezó a jugar, ¿quería ser futbolista de mayor?

—No se me pasaba por la cabeza serlo, pero sí recuerdo muchas veces haber dicho de pequeña que quería ser “futbolista profesional, pero en chica”. Porque antes no se veía y lo decía así. A día de hoy esto viviendo lo que de pequeña soñaba.

—¿Tuvo referentes femeninos?

—Tuve de os dos. Cuando era pequeña, pequeña, mi referente era Iniesta, obviamente. Me encanta. Y cuando fui creciendo, con unos 12 años, ya vi a jugadoras top en las que fijarme y mi referente era Vicky Losada.