Aitana y Graham son imparables

El Barcelona estará en su sexta semifinal consecutiva, la séptima de su historia. Las azulgranas ganaron, sin demasiado brillo, a un peleón y batallador Brann que volvió a agarrarse a las paradas de su meta Mikalsen y a su capacidad de lucha. Y eso que las de Giráldez se pusieron por delante muy pronto con un golazo de Aitana y sentenciaron por medio de Rolfö, que vuelve a ser la que era. Sin embargo, el tanto de Svendheim puso picante a la eliminatoria y dio alas a un Brann que tuvo ocasiones para empatar. Pero este Barcelona es infalible y lo volvió a demostrar. Otra victoria en el Johan, donde no conoce la derrota desde su estreno en 2019 y otra semifinal. En abril llega uno de los cocos de la competición: el Chelsea. Pero si alguien debe tener miedo son las londinenses a un equipo que está marcando una época.

El Brann tenía mucho que ganar y poco que perder en la Ciudad Condal. Por eso, salió sin miedo ante un Barcelona que presentaba la gran novedad de Alexia, de nuevo, en su posición natural y Brugts como referencia. Lo que tenían claro las azulgranas es que el marcador era corto y debían marcar cuanto antes. Con una Alexia muy participativa, una imparable Graham y una agresiva Walsh, el partido era del Barcelona. Porque el conjunto noruego tenía claro que quería salir con el balón controlado, sin rifarlo, y ahí la presión asfixiante del Barcelona hacía mucho daño. A los cinco minutos, ya llevaba cinco córners a favor. Sin embargo, las noruegas tenían su plan y Gaupset, una de las jugadoras más peligrosas, lo dejó claro en la primera que salieron de la presión. Su remate se fue fuera por poco. Mientras, Graham seguía a lo suyo. No había quien la parase por su banda y le dejó la primera a Aitana, que no pudo dirigir su tiro a puerta. Como en la ida, Mikalsen se convirtió en la heroína visitante. La primera se la sacó a su compatriota Graham, la segunda también con una salvadora mano cuando la extremo tenía todo a su favor tras el enésimo robo azulgrana en la salida. Mariona y Aitana no encontraron portería en sendas ocasiones. Porque el partido sólo tenía un color, el azulgrana. Otra vez Mikalsen sacó una impresionante mano al remate de Paredes tras centro de Alexia. Pero, aun así, las noruegas sabían que un gol les metía en la eliminatoria y Gaupset lo volvió a intentar. Walsh, con un chutazo desde fuera del área, tuvo otra clarísima. Entonces, en el ecuador de la primera, otro robo arriba acabó en los pies de Aitana que amagó, tiró a su marcadora y metió el balón de rosca imposible esta vez para Mikalsen.

Eliminatoria controlada

El Barcelona tenía la eliminatoria totalmente controlada y lo sabía. Así que tampoco apretó el acelerador, aunque seguía teniendo el control del balón y con el marcador a favor. Todo estaba de cara. Porque las noruegas seguían intentando salir rápido a la contra, pero Paredes y Engen eran un muro y las ocasiones en la portería noruega seguían llegando. La tuvo Alexia, que era el motor del equipo, protagonista y con ganas de demostrar que ha vuelto para quedarse. La historia se repetía una y otra vez. Graham dispuso de una grandísima ocasión que acabó con otro paradón de Mikalsen. También Mariona pudo poner la sentencia. Porque el Brann no renunciaba a su filosofía de sacar el balón desde atrás y así lo intentaba siempre que ganaba la posesión. En total, 14 tiros, cinco de ellos a puerta de las azulgranas que estaban cómodas y apenas sufrían.

Lo intentaba el Brann nada más iniciarse la segunda parte, pero Cata Coll se mostraba muy segura en todo momento. Graham y Alexia, dos de las jugadoras más activas en la primera mitad, fueron las primeras en intentarlo. Y, en el minuto 55, llegó la sentencia. Otra vez Graham se fue de su par, llegó a línea de fondo y la puso en boca de gol donde tocó una defensa, Mikalsen y acabó en los pies de Rolfö que sólo tuvo que empujar el balón a la red. La sentencia, la eliminatoria estaba prácticamente cerrada. Empezó a hacer cambios el Brann buscando más aire para no irse con una goleada de vuelta a Noruega. Pero el partido no cambió. El Barcelona seguía teniendo las ocasiones y las llegadas. Mikalsen, de nuevo, evitó el tanto de Graham y más tarde el de Brugts.

Una fe inagotable

Porque el Brann parecía muerto, pero sólo lo parecía. Mariona tuvo un mano a mano para matar el partido, la eliminatoria y a las noruegas. Pero lo que llegó, en la siguiente jugada, fue el gol del Brann. Un gran pase de Gaupset para Svendheim que parecía que centraba, pero el balón tocó en el palo y se fue para adentro. El Brann necesitaba aún dos goles para igualar la eliminatoria, parecía imposible, pero las noruegas no iban a vender su derrota tan fácilmente. Giráldez movió el banquillo buscando piernas frescas con Salma, Torrejón y Patri Guijarro y funcionó. Porque las azulgranas volvieron a hacerse con el control del partido y Patri, en un excepcional pase, asistió a Rolfö, que se estrelló con el palo. El Brann no renunció a tener el balón, al revés, ganaba más posesión y por momentos conseguía dominar al Barcelona con una fuerte presión y sin rifar nunca el balón. Y la tuvo para poner el empate Aahjem tras una gran jugada individual que se fue rozando el palo a diez minutos para el final. El Barcelona quería que pasaran los minutos, porque las noruegas estaban teniendo sus mejores minutos en esta eliminatoria, llegando y pisando el área de Cata Coll. Entonces, apareció Graham otra vez. Se fue de una, de dos, llegó a línea de fondo, puso el balón a Aitana que vio a Patri Guijarro sola en boca de gol y le dio un balón que la mallorquina sólo tuvo que empujar. Ahora sí había llegado la sentencia. El Barcelona ya está en semifinales. El sueño del pleno de títulos está cada vez más cerca…

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