La Real avanza con lo justo ante la UD Logroñés

La Real Sociedad puede seguir soñando en la Copa del Rey. Puede hacerlo gracias a Robert Navarro. El atacante catalán se está convirtiendo en el jugador txuri-urdin del torneo del KO. Abrió el marcador en Coria y ha sido el autor del gol de la victoria en Las Gaunas. Él ha llevado a los donostiarras a octavos de final con su solitario gol en la primera parte, que le permitía superar a un combativo UD Logroñés, que se despide de la Copa con todos los honores, plantando cara hasta el final al tercer clasificado de LaLiga.

Salió la Real Sociedad con ímpetu, haciendo caso a su entrenador, convencido de que si no le ponía intensidad al partido iba a pasarlo mal. Y no quería ningún susto, al menos de inicio. Porque como se esperaba, la Unión Deportiva Logroñés compareció con la ilusión por montera, presionando arriba y fuerte a los realistas, y llegando con relativo peligro, gracias a las galopadas por la derecha del ex realista, Zourdine Thior, bautizado para la posteridad por Imanol como ‘El Dembélé de Orio’. Fue interesante su enfrentamiento con Aihen Muñoz, con quien compartió vestuario en las categorías inferiores de Zubieta. Echó literalmente chispas el duelo por la banda, que empezó teniendo color riojano, pero acabó imponiéndose el navarro de la Real. Y precisamente por esa banda llegó el único gol del primer periodo. Un pase entre líneas maravilloso de Brais Méndez para la carrera de Robert Navarro, que con un toque sutil batía por bajo a Crettaz. El atacante catalán sigue reivindicándose cuando juega, aprovechando la Copa para demostrar que tiene sitio en esta Real. Abrió el marcador en Coria. Repitió en Las Gaunas. Va a más. Y se está ganando cada titularidad que le da Imanol, especialmente en la Copa.

El gol de Robert Navarro hacía justicia al dominio de la Real, tanto con balón como territorial. Porque aunque empezó con alguna duda, poco a poco fue encerrando en su área a la UD Logroñés, que se defendía con orden y concierto, pero le costaba tener la pelota y llegar con peligro a la portería de Remiro, que no necesitó hacer ninguna intervención de mérito en todo el partido. No estaba brillante la Real, o no tanto como en otros partidos; pero si era eficaz con la pelota, y merodeaba la portería de Gonzalo Crettaz, especialmente con llegadas de Sorloth y Brais Méndez que morían mansamente en las manos del portero riojano.

Tras el descanso, la Real se limitó a vivir de las rentas del gol de Robert Navarro en el primero tiempo. Seguía dominando el partido, pero no llegaba con claridad. Aunque pudo hacer el segundo con un remate de Sorloth que entró en la portería del Logroñés, pero estaba anulado por un fuera de juego muy justo, tanto que parecía que estaba en posición reglamentaria. No llegó el segundo gol de la Real, le empezó a costar generar más peligro, el partido del mantuvo abierto y el Logroñés se lo creyó un poco, presionando más arriba, pero sin generar ocasiones de peligro. Remiro siguió sin hacer ningún intervención relevante hasta el final. La Real, sin grandes alardes porque tampoco estaba el día para ello, controló el choque hasta el final, sin pasar apuros, hasta disfrutar de su pase a octavos con los 3.000 seguidores realistas que viajaron a Las Gaunas. Se tomará otro sorbo de Copa. Y la Unión Deportiva Logroñés se despide de la Copa con la cabeza alta. Le toca centrarse en su verdadera realidad, la Primera Federación.