Clemente y Marc Cardona rescatan a Las Palmas

Rió el último, y lo hizo mejor que nadie. Es lo que le acaba de suceder a la Unión Deportiva Las Palmas, que por segunda semana consecutiva remonta un marcador adverso para ganar el partido. SI hace unos días fue el Ibiza, la víctima de esta noche fue un combativo Mirandés, que se acabó quedando sin fuerzas. Los grancanarios se acuestan líderes.

Ser el mejor equipo de las últimas 10 jornadas no puede ser casualidad. Se empeñó en demostrarlo el Mirandés, cuya valentía en ataque y orden en defensa al inicio del duelo supo contener de inicio a Las Palmas, otra vez gafada por las lesiones y Sandro cayéndose del equipo titular en el calentamiento, presente en el banquillo, como Álvaro Sanz, último fichaje del equipo hoy visitante. El ligero dominio de la formación de Etxeberría tampoco es que se tradujera en ocasiones claras, mucho menos en algún gol, y a punto estuvo de pagarlo muy caro.

De pronto, como despertando de la pesadilla en un segundo de sobresalto, Las Palmas tocó la corneta y sus futbolistas salieron a rebato en busca de la portería del colosal Ramón Juan. Así, Moleiro, Viera y Marc Cardona, estos últimos en al menos dos ocasiones, marraron clarísimas ocasiones de gol en un tramo de 15 minutos. Se vació la formación local en ese intenso cuarto de hora pero sin suerte, así que tocaba reponer fuerzas en el descanso.

Antes, ante la reducción de intensidad ambos equipos se tanteaban sin suerte para ninguno de ellos, acaso implorando los visitantes, destacados tres ex de Las Palmas como Martín, Navas y Pinchi, que llegara un tiempo de receso con el marcador inmaculado, como así sucedió finalmente.

Cuestión de tiempo.

Abrir el marcador parecía ahora cuestión de huecos, más que de tiempo, y ahí se le abrió el cielo al Mirandés. Ocurrió que, al menos en el minuto 50, marcó uno de los goles de la temporada. Gelabert, siempre atento, aprovechó una indecisión común de Fabio y Viera para galopar hasta el centro del campo, cediéndole el balón a Roberto López, quien no se lo pensó para lanzar un beso volado desde la línea intermedia que acabó sorprendiendo a Valles.

Parecía que Las Palmas estaba fuera del partido. Fue entonces cuando entró Marvin Park, canterano del Real Madrid llegado a Gran Canaria el pasado verano y que es vitamina pura cada vez que juega. Así, un centro suyo acabó en un mal despeje de Navas, aprovechando Óscar Clemente el rechace para hacer el empate ante el júbilo de la animosa afición insular.

Se vino arriba Las Palmas, que pasó a dominar el partido por completo, ni que el campo estuviera cuesta abajo hacia la portería de Ramón Juan, que se tuvo que marchar lesionado. Además, Viera y Moleiro, siempre indetectables, lo son todavía más cuando se asocian como el minuto 74, cuando una delicia del segundo acabó en conato de asistencia al 21, que estampó el balón en el palo.

Tenía Las Palmas totalmente cercado a un apocado Mirandés, mas el reloj se consumía ante la desesperación local. Sin embargo, cuando el empate se mascaba, Pejiño frotó su lámpara futbolística para lanzarle una preciosa asistencia a Marc Cardona, que metió su bota derecha desde el corazón del área rival para, ahora sí, decantar el marcador.

Con esta victoria, Las Palmas recupera de manera provisional el liderato en función de lo que haga el Eibar. Mientras, el Mirandés, que poco puede reprocharse, acaba con la racha que le situaba como el mejor equipo de las últimas 10 jornadas.