Xavi exige una reacción: “Ganar LaLiga es nuestra máxima prioridad”

Xavi Hernández vivió una de sus noches más complicadas como entrenador el miércoles en el Camp Nou. Antes de empezar el partido, y tras consumarse la eliminación en la Champions en Milán, el técnico apeló al orgullo a sus pupilos, consciente que iba a ser muy complicado salir al campo con la motivación que exigía un partido de la máxima competición continental y además contra uno de los mejores equipos del mundo, el Bayern de Múnich.

Durante el encuentro, Xavi constató impotente cómo el conjunto bávaro arrasaba a los blaugrana, ganándoles en todos los pulsos, poniendo el doble de intensidad y buscando con insistencia la portería de Ter Stegen. El 0-2 de la primera parte aún fue corto. En el descanso, Xavi volvió a apelar al orgullo, recordando que más de 80.000 personas habían acudido aún sabiendo que estaban eliminados, pero ni ese argumento tan inapelable fue suficiente. El equipo siguió sin encontrar ninguna solución ofensiva, siendo superado en todas las facetas del juego.

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Cuando el colegiado pitó el final del partido, los jugadores se refugiaron rápidamente entre las cuatro paredes del vestuario, para intentar olvidar una noche tan ignominiosa. Pero la afición, imperturbable al desaliento, reclamaba a sus ídolos, pese tan dolorosa derrota, y Xavi instó a sus hombres que regresaran al campo y agradecieran al culé el apoyo incondicional. Y así lo hicieron una gran parte de jugadores -algún capitán se esfumó incomprensiblemente-, con Xavi al frente.

Después, cuando regresaron al vestuario, Xavi pronunció unas palabras a la plantilla. Para empezar, lamentó que el equipo no se hubiera “presentado” en el campo, dejando muy claro que habían sido “muy inferiores al rival” por primera vez esta temporada, y que el público “no se merecía” una despedida tan triste de la Champions en el Camp Nou. Los reproches fueron a más, pero sin individualizar, subrayando que “no se puede competir en Europa” como lo habían hecho hoy y que consideraba “un paso atrás” el rendimiento del equipo.

Sin embargo, tras el varapalo inicial, intentó levantar los ánimos de sus hombres, recordando que “hemos perdido una batalla, pero no la guerra”, ya que “todavía queda mucha temporada y muchos títulos por disputar”, y poniendo especial hincapié en la Liga, “nuestra máxima prioridad y por el que hay que ir a muerte hasta el final”.

Tras hablar con los jugadores, Xavi se reunió con Joan Laporta en su despacho profesional para valorar el partido y la eliminación de la Champions. Las primeras conclusiones es que algunos imponderables acabaron siendo desgraciadamente decisivos, como las numerosas lesiones tras el parón de selecciones y los pésimos arbitrajes en Múnich y Milán, además del infortunio en el Camp Nou contra el Inter, cuando todo estaba a favor tras abrir el marcador en la primera parte. Asimismo, se reconoció que el equipo seguía en fase de construcción y que necesitaba más tiempo para madurar y encajar todas las piezas, recalcando que las valoraciones se harán a final de temporada.