Un informe independiente califica de “criminal” la actuación de la policía en la final de Champions de París

Un informe independiente consideró que la policía francesa realizó “una agresión criminal” contra los espectadores que acudieron a ver la final de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Liverpool del pasado 28 de mayo. El informe también sugiere que hubo “fallos atroces” de la UEFA que provocaron que miles de aficionados quedaran atrapados en una grave congestión en los accesos al Stade de France, que terminó en enormes cuellos de botella por culpa de la venta de entradas y los torniquetes del recinto, y un retraso del inicio del encuentro de más de media hora.

Además de ser objeto de violencia por parte de bandas locales antes del partido, la policía de París también usó gases lacrimógenos contra los aficionados que esperaban para entrar al estadio y contra los que se encontraban en la ‘fan zone’ a varios kilómetros de distancia. El panel de este informe estuvo dirigido por el profesor Phil Scranton, quien también dirigió el que investigó la tragedia de Hillsborough en 1989 en el que murieron 97 aficionados del Liverpool y que ha sido un firme defensor de las familias afectadas. El académico elaboró su propio informe basado en 485 testimonios de testigos oculares, dos tercios de los cuales mencionan el temor por sus vidas en aquella noche del pasado 28 de mayo.

“Las agresiones policiales persistentes y aleatorias contra los aficionados y el uso de gases lacrimógenos contra hombres, mujeres y niños atrapados en espacios confinados fueron imprudentes y peligrosos. Constituyeron una agresión criminal”, afirma el informe. Este también resalta “la hostilidad de la policía antes del partido (en la Fan Zone y accesos al estadio), durante (en el estadio) y después (en el estadio, las estaciones y en la Ciudad)”, acciones que creen que son “infracciones del derecho penal”.

“En el Stade de France hubo fallos atroces en todos los aspectos de la responsabilidad de la UEFA por la seguridad del estadio. El error continuo en el manejo de las multitudes comprometió gravemente la salud y el bienestar de los aficionados”, añade. El documento recalca que de las declaraciones recogidas de los hinchas “se desprende claramente que fueron puestos en riesgo por una vigilancia policial agresiva, medidas de seguridad ineficaces y la falta de implementación de planes integrales de gestión de la seguridad del estadio”. En este sentido, cree que por “su comprensión y por alguna experiencia directa” como la vivida en 1989, los aficionados del Liverpool “evitaron que ocurriera una tragedia fatal a través de su acción colectiva”.

El informe apuntó que la organización de la final mostró una falta de coordinación entre los diferentes agentes involucrados y advirtió que estos errores y la presencia de bandas criminales se podrían repetir en la Copa del Mundo de rugby de 2023 y los Juegos Olímpicos de París de 2024. “Es difícil comprender la secuencia de eventos que constituyeron la debacle en París, que dejó a tantas personas físicamente lesionadas, psicológicamente dañadas y económicamente comprometidas”, dijo Scranton, profesor emérito de la Facultad de Derecho de la Queen’s University Belfast.

Este aseguró que “hombres, mujeres y niños fueron objeto de violencia policial indiscriminada y sin provocación, incluidos ataques con gases lacrimógenos y porras, junto con robos a punta de cuchillo por parte de bandas locales”. “Muchos se fueron antes del partido y los que se quedaron fueron objeto de más ataques por parte de la policía antidisturbios y las bandas al salir del estadio y llegar a las estaciones locales. La responsabilidad por el colapso de la autoridad, la gestión y la seguridad recae en quienes organizan y administran el evento”, sentenció.