La revancha de Rüdiger

Se lo ‘recordaba’ a Ancelotti un periodista alemán en la rueda de prensa después de ganar al Mallorca. “¿Rüdiger va a jugar la vuelta o hay dudas?”, le inquiría Nils Kern, periodista que sigue la actualidad del club blanco para el portal germano Real Total. Carletto, que sabía por dónde iban los tiros, le respondió risueño, con una sonrisa pícara y haciendo gala de sentido del humor. “Puede ser”, espetó irónico el técnico del Madrid, como queriendo no dar por obvio lo que todos saben: que este año Rüdiger sí será titular en el Etihad.

Porque el año pasado el alemán vio la sangría de su equipo desde el banquillo. El excelso marcaje que hizo a Haaland en el Bernabéu en el primer partido de la semifinal no fue suficiente para hacerse hueco en un once al que accedió en la ida por la sanción de Militao. Ancelotti prefirió confiar en la que fue su pareja de centrales de cabecera, la que formaban el brasileño y Alaba. Y el City acabó arrollando a los blancos.

“Todos hicimos muy buen trabajo manteniendo a raya a Haaland, no recibió muchos pases. Ancelotti no me pidió perdón por no ponerme en la vuelta. Él tuvo su idea y yo lo tengo que respetar, aunque no me gustase. La idea este curso es la misma, controlar a los jugadores peligrosos del City. Es complicado controlar a Haaland, pero vive de los pases de sus compañeros. No puedes controlarlo todo”, afirmaba Rüdiger la víspera de la ida.

Pero Rüdiger (31 años) consiguió controlarlo todo y volvió a fajarse con un Haaland que la semana pasada pasó desapercibido (apenas remató una vez y solo tuvo cuatro intervenciones en el área blanca) en un Bernabéu donde el City tuvo que abrirse paso a cañonazos con tres goles desde fuera del área. Se repitió el primer capítulo de la historia para el berlinés, pero esta vez el segundo será diferente. El ‘anti-Haaland’ sí tendrá esta vez la oportunidad de batirse en duelo con el noruego en su casa, en Mánchester, y resarcirse de su suplencia hace un año. Está siendo una temporada en la que el alemán ha tenido que asumir mayores responsabilidades. La lesión de Militao primero y de Alaba más tarde le han convertido en el jefe de la defensa madridista. Titular indiscutible para Ancelotti, primero casi por obligación, pero ahora también por convicción.

El defensa viene siendo, salvo contratiempo, una pieza indispensable en los planes de Ancelotti. Quitando sanciones y lesiones, el entrenador madridista sólo le ha dado descanso en dos momentos. En el partido que cerró la fase de grupos contra el Unión Berlín, con todo decidido, y en la eliminatoria de Copa ante la Arandina. El cronómetro le sitúa como segundo madridista con más minutos esta temporada (3.314′) sólo por detrás del infatigable Valverde (3.544′).

En el Etihad, sin el sancionado Tchouameni y salvo sorpresa, Rüdiger repetirá en el eje de la zaga con Nacho. Ya son el dúo más empleado por Ancelotti esta temporada. Les ha alineado juntos en 18 partidos. Su balance juntos es casi impecable. Con ellos dos el Madrid sólo ha cedido el empate de la vuelta ante el RB Leipzig y la eliminación copera ante el Atlético. Y en los 11 partidos en los que Lunin ha jugado a la espalda de ambos, el ucranio ha mantenido la portería a cero en siete encuentros.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.