La operación 16 puntos

Rehabilitado de manera sorprendente en Liga, donde caminaba a cinco puntos del líder después del Clásico, y ahora es primero con partido y medio de ventaja, la Champions es el otro descosido que tiene pendiente Flick. Maniatado por el PSG, sorprendido por el Brujas; y superado sin discusión por el Chelsea, el Barça está en una situación límite y no depende de sí mismo para estar entre los ocho mejores de la fase-liga. Si acaso, sólo le queda una opción: ganar los tres partidos que quedan, conseguir un gran goalaverage y rezar por meter la cabeza en el último sprint. Eintracht, Slavia y Copenhague aparentan ser rivales propicios para hacer el nueve de nueve. Pero Europa es Europa; y el mejor ejemplo es el Jan Breydel hace unas semanas.

Es imposible desvincular el Barça-Eintracht de esta noche (sigue el partido en directo en AS.com) de lo que ocurrió hace tres años y medio en el Spotify Camp Nou. Aquella marea de camisetas blancas que dibujaron un cuadro nunca visto en el coliseo azulgrana. Completamente desconcertado por el entorno que envolvió al partido, el equipo rozó el ridículo y fue eliminado en cuartos de final de la Europa League, el limbo por el que circuló un par de temporadas después de acumular fiascos en la primera fase. Eso sí, el Eintracht, ahora 27 del ranking UEFA, no tiene nada que ver con aquel equipo que jugaba bien las transiciones, con dos puñales en las bandas (Kostic y Knauff), más Borré, Lindstrom y Kamada arriba. Esta vez, llega a Barcelona después de ser humillado en Leipzig, casi sin delanteros (Batshuayi, Burkardt con baja), y sin la expectativa de que sus aficionados llenen las gradas como en 2022 en virtud a las medidas de seguridad que el club ha implementado para evitar la reventa.

El Barça ha recuperado su fiereza. Ha remontado tres partidos seguidos (Alavés, Atlético y Betis) y se ha sabido reponer a las lesiones. Por el camino, Flick, que había aparentado algunas grietas al inicio de temporada, ha recuperado a Joan García, Pedri y Raphinha, y se ha sacado algún conejo de la chistera. Gerard Martín de central, Eric de mediocentro; y Lamine, aunque fuese improvisado, de ‘10’ en La Cartuja. La competencia echa chispas. Ferran ha adelantado por la derecha a Lewandowski, Fermín ha tenido la ‘suerte’ de que Olmo se ha lesionado cuando mejor estaba y Rashford y Bardghji piden sitio. El once es una incógnita. La vida vuelve a sonreírle al Barça, pero la Champions esconde una trampa en cada esquina. Bien lo sabe el Barça, que va para once años sin pisar una final.

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