La noche loca de Koundé en el Pequeño Maracaná

Jules Koundé llegó fresco al partido contra el Estrella Roja. El defensa francés descansó en el derbi contra el Espanyol y en su lugar entró Héctor Fort. Flick lo quería en plenitud de condiciones en el duelo ante los serbios porque es uno de sus jugadores más utilizados y pese a su excelente condición física (trabaja también después de los partidos) también necesita parar para no desgastarse en exceso. El domingo el Barcelona visita el Reale Arena, campo difícil, y la temporada es muy larga.

En el primer tiempo estuvo un poco tímido en ataque aunque subió mucho por su banda. En principio, le tocaba bailar con la más fea del conjunto serbio, Maksimovic, el osado futbolista de 17 años que quería demostrar que era mejor que Lamine Yamal. Visto el partido, no lo pareció para nada y acabó sustituido.

Imparable. Si en el primer tiempo quizá le faltó acabar de hacer daño con sus subidas por la banda, en la segunda mitad se desató por completo. Koundé vivió una noche loca en el Pequeño Maracaná y solo le faltó marcar para coronar una noche redonda. El lateral francés acabó con un ‘hat-trick’ de asistencias.

Primero asistió a Lewandowski para que firmara su gol número 99 en la Champions, tres minutos después se la dio a Raphinha para que acabara con su tradicional gol de cada día y poco después le regaló el gol a Fermín. Koundé llevaba una asistencia de gol esta temporada; fue en la Liga en el campo del Girona y la aprovechó Dani Olmo para marcar.