Hecatombe o catarsis

Lo de hoy se llama partido pero no, en realidad no lo es. Es algo mucho más. La vida (si se gana) o un abismo (si se pierde). Aunque la situación en el grupo, el Brujas escapado y el resto (Bayer, Oporto y Atleti) a la par, empatados en puntos, provoque que la hecatombe, si la hubiera, aún podría resolverse en las dos jornadas que quedan de la fase de grupos, si el Atleti pierde esta noche sumará su tercera derrota seguida en un grupo sin grandes cocos, asequible cuando se formó (sigue el encuentro en directo en As.com).

Pero en el fútbol no hay Cenicientas. El Brujas es la prueba, líder incontestable. Puede clasificarse ya para octavos (si gana) y primero (si gana y el Bayer y el Oporto empatan) con 12 puntos (lleva 9) y paso impoluto. Sin derrotas ni goles en contra. El Atleti no se clasifica como primero en un grupo de Champions desde la 2016-17. Su bagaje es de 11 victorias en 30 partidos, solo una en casa en sus últimos nueve en Europa. Un drama.

Como su juego. En declive. No encuentra el equipo el Cholo ni tampoco parece hacerlo a sí mismo, entre un sistema (5-3-2) y otro. Pero en tardes como ésta solo vale seguir la senda de Luis, el ganar, ganar o ganar. Lo demás es estrépito. Con una grada que, aunque el sábado ante el Girona pitó el pobre fútbol rojiblanco aún ganando 1-0, deberá hacer del Metropolitano un Calderón. Hace una semana entre Jutglà, Sowah y Buchanan, además de Onyedika en el centro, descosieron y tumbaron. El fin de semana Hoefkens le dio descanso a los dos primeros y sólo unos minutos a Buchanan. Perdió el Brujas ante el Westerlo pero es que su cabeza estaba en Madrid, Madrid y la Champions, siete cambios.

Las ideas del Cholo

En Madrid le esperaba el Cholo con la buena noticia de que Grizi ya no será más 30′ o no por una cláusula al menos y la mala de que João es cada vez menos titular y más intrascendente. En la noche de la hecatombe o la catarsis sobre la que resurgir, piensa el Cholo en Saúl para el carril zurdo, duda entre Witsel y Kondogbia en el centro y seguirá, parece, apostando por Correa, ese futbolista que siempre aparece cuando se le necesita. Sobre todo en días como este. De todo o nada. O casi.