Griezmann-Morata, la mejor delantera de siempre del Cholo

En noviembre parece ya lejos ese calor que saludaba a los rojiblancos en su regreso a Los Ángeles de San Rafael para iniciar la pretemporada. Ese momento en el que Álvaro Morata estaba más para allá que para acá, con la certeza de que su camino estaba fuera de casa, otra vez, el delantero para Simeone era, o parecía que iba a ser, Memphis, no él, y el madrileño se quería sentir importante. Mientras, de Arabia le lanzaban cantos de oro e Inter, Roma, Milan y Juve le querían de regreso a Italia pero sin poder pagarle, ni su sueldo, alrededor de cinco millones, ni su traspaso, al menos veinte. Así que Morata se quedó, se fue quedando.

Hasta que en Corea se sentó sobre un balón mientras el Cholo, escudado por su inseparable Gustavo López, le dijo esas palabras que bendijeron sus botas como agua santa. “Eres mi delantero y espero de ti 18 goles”. En noviembre le faltan ya solo seis para alcanzar esa cifra. En este momento no hay en la Champions un delantero que sume más que los cinco que él lleva en la fase de grupos. Ni Haaland para el City (5), ni Evanilson para el Oporto (4) ni su compañero Griezmann para el Cholo (4). El delantero del Atleti suma 12 (que son 16 si se cuentan los cuatro que ha hecho en este periodo, desde que la temporada comenzó, con España). Pero es que el francés le sigue, son once. Juntos forman la mejor delantera que jamás tuvo Simeone, en todos sus años de Atleti, a estas alturas. En noviembre. Y tras doce jornadas de Liga.

Porque Simeone tuvo en la 2012-13 a Falcao y a Diego Costa pero juntos no alcanzaban los 23 goles que suman en estos momentos Morata (12) y Antoine (11). El hispano-brasileño llevaba cuatro (ante el Betis y el Jaén en Liga y ante el Hapoel y a la Académica en Europa League) y el colombiano, 13 (tres al Athletic, dos al Betis, y uno al Rayo, Valladolid, Mallorca, Real y Osasuna, además de otros tres al Chelsea en la Supercopa de Europa). Eran 17 en total.

Los dos años en los que el argentino visitó Neptuno para ofrecerle LaLiga, en la 2013-14 y la 2020-21, tuvo dos delanteros que trituraban partido a partido, goles a goles. Diego Costa es el que, a las órdenes del Cholo, a estas altura de la temporada, en la primera, aquella de la 2013-14, más goles sumaba: 15. Dos al Sevilla, dos a Osasuna, dos al Celta y dos al Austria en la Champions, además de los que le hizo al Rayo, Almería, Valladolid, Real Madrid, Betis, Granada y Athletic. Villa, su compañero fundamental en la punta, llevaba tres, ante Barcelona, Real y Almería. Juntos, 18. A cinco de los que ahora llevan Grizi y Morata. En la 2020-21, Suárez y João Felix juntos llevaban 12, como los que ahora mismo suma el madrileño. El uruguayo había hecho cinco, con un doblete ante el Granada y tantos al Celta, Betis y Cádiz. El portugués, siete: dos al Salzburgo y otros dos al Cádiz y a Osasuna, además de uno al Granada.

Los 23 goles que ahora llevan Griezmann y Morata solo hay una pareja en Europa que los supera, la formada por Harry Kane y Sané, que llevan 26 (17 el primero y nueve el segundo). El francés convertido en el mejor futbolista de la historia rojiblanca ya y recuperada la versión goleadora que tenía cuando se fue al Barcelona, en el verano de 2019. Cuando regresó ya no parecía aquel goleador que se había marchado. El que a estas alturas de temporada, doce partidos de Liga, cuatro de fase de grupos de Champions, sumaba cinco en la 2014-125, nueve en la 2015-16, siete en la 2016-17, tres en la 2017-18 y seis en la 2018-19.

La vuelta del Griezmann total, también goleador

Volvió y la primera temporada (2021-22) penó el volver a enfrentarse a una grada a la que le había roto el corazón con su marcha y una entrada por detrás de Carvajal en el derbi de Liga en el Bernabéu que le provocó una lesión de la que recayó y le formó un tapón gigantesco en la cabeza. Ocho goles hizo, los peores números de su carrera. La siguiente, la pasada, a falta de goles, asistencias. Acabó la temporada siendo el mejor asistente de la Liga y su mejor futbolista a secas, aunque los que votaran el Balón de Oro no lo vieran, o quisieran verlo, ubicándole el número 21º en el ránking final. Hizo 16 goles y repartió 18. Este año lleva cero asistencias. Pero vuelve a volar alto sobre su capa, mientras se le caen de sus propios bolsillos. Como a Morata. Para felicidad del Cholo.

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