‘Chorreo’ de los invencibles de Julián

Con todos ustedes, los invencibles de Julián. Sin importar rival. Sin importar contexto. En Liga o en Europa. Ganar, ganar y ganar. Siempre. Once partidos, once victorias. Líder de todo. La última víctima, el Liverpool. En la Youth. Un triunfo que coloca el top-6 a tiro de trámite (pleno al cuatro y solo quedarán dos jornadas). Contra un lobo que terminó siendo cordero. A merced de un ejército que se exhibió en Kirkby. Los goles fueron de Jacobo, Adri Pérez, Barroso y Diego Aguado. El protagonismo, de todos. Porque en este Juvenil A, nadie camina solo. En unas horas será el turno de los mayores, pero las joyas de La Fábrica ya tienen su pleno. Una exhibición. De aperitivo, un chorreo.

Fue un choque de titanes. Eso es indiscutible, sea cual sea el resultado. De dos gigantes. Sin importar categorías. Si el Madrid se había encontrado con planteamientos conservadores, de esperar y cabalgar, los de Rob Page juegan (mientras pueden) a otra cosa. Por algo llegaban invictos en la Youth (dos victorias y un empate, ante el Atleti). A morder. Y si puede ser en campo rival, o inmediatamente tras pérdida, ese geggenpressing que popularizó Klopp a orillas del Mersey y en el mundo, mejor. Por algo triunfaron en Frankfurt en una oda al gol (4-5). Pero también al desorden. Y ello convirtió el inicio en un trampantojo.

En ese caos no tardaron en crecer los de López de Lerma. Ante un planteamiento sinónimo al propio, aplicar orden. Esa fue la receta. Porque ellos sí lo tienen. Equilibrio. Calma. Fútbol. Correr es importante, pero también saber hacerlo. Hasta que el talento comenzó a hablar. Con la banda izquierda como trampolín. Una autopista para Diego Aguado y Liberto. Solo que el peaje era para Prince Cissé, que vivió una pesadilla. Fueron ellos los cocineros del primero. El lateral condujo y abrió, el extremo cruzó un balón, un caramelo. Y allí había un killer. Jacobo Ortega, tac. Un toque y a la red. Y a mandar.

Cómodos. Con balón y sin él. Anulando, con un Ariel Nkoghe imperial, la pólvora red. Apenas una aparición de Koné-Doherty y un chut de Morrison, repelido cómodamente Javi Navarro. Dos futbolistas que ya han debutado con Arne Slot. Dos futbolistas que fueron islotes en un Liverpool con, tras el gol, mantuvo el ímpetu, pero perdió el colmillo. La mejor noticia para Page, de hecho, fue llegar con vida al refrigerio. Porque Jacobo tuvo el doblete, con un zapatazo que dejó temblando el larguero. Porque Liberto obligó a volar a Hall. Porque el dominio era perenne. Ocasiones que llegaron tras grandes presiones, de Carlos Díez, de Beto. Un primer tiempo que haría que Klopp estuviera orgulloso... de los blancos.

Y tras el segundo silbatazo, justicia. El premio que se había resistido. De nuevo con Diego Aguado como protagonista. Nada más arrancar colgó un córner y apareció Adri Pérez. De zurdo a zurdo. Una jugada de pizarra. Y segundo gol. Un jarro de agua congelada para los parroquianos de Langtree Park, que veían cómo la esperanza desaparecía. Ya no se buscaba el empate, sino el milagro. Más aún cuando las ocasiones seguían siendo visitantes. A punto estuvo Adri de sentenciar, pero aparecieron los reflejos de Hall, el único sostén scouser. Hasta que ni siquiera él fue suficiente.

Apisonadora

El pasito atrás de los de Julián, lógico por contexto, no tardó en ser dos hacia delante. Minutos antes habían entrado al campo Yáñez y Barroso. Dinamita que no tardó en explotar. Balón largo a Dani al contragolpe, pausa, apertura a Jaime y, con la zurda, a la jaula. Uno más del pichichi de La Fábrica, que lleva tres en Youth y nueve en total. Con el Madrid o con el Juvenil A, siempre puntual a su cita con el gol.

Y ahí, si es que estuvo en algún momento, desapareció el Liverpool. Javi Navarro solo veía elásticas rojas de lejos. Y las blancas querían morder una vez más. Porque el goalaverage cuenta. Y así, sobre la bocina, Diego Aguado se llevó el premio a su partidazo. Prácticamente los dos pies en el top-6 de la Youth, solo queda esperar. Con una actuación sobresaliente, coral. Contra un Liverpool inerme. Un ‘chorreo’. Aquella expresión de tan amargo recuerdo para los blancos en el pasado que tan bien ha envejecido. Los Invencibles de Julián siguen siendo invencibles.

Clasificación

Formato

El formato de competición de la Youth League es similar al de la Champions, pero con algunas variantes. Sólo se juegan seis jornadas (coincidiendo con las seis primeras de Champions) y se clasifican los 22 primeros (no los 24), que pasan todos a dieciseisavos de final. Los seis primeros se cruzan con los clasificados del 17º al 22º, mientras que los clasificados del 7º al 16º se enfrentan con los diez equipos ganadores de la fase de campeones nacionales. Los seis primeros tienen, además, otro premio: jugar la eliminatoria de dieciseisavos, a partido único, en casa

Calendario

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