Pol Lozano, el liquidador
El mediocentro, que llevaba un mes sin aparecer, es perfecto para cerrar los partidos. El Espanyol ha cosechado con él 11 victorias, dos empates y una derrota.
Entre las buenas noticias que para el Espanyol deja la victoria del domingo frente al Mallorca, más allá de términos clasificatorios y del estreno goleador de Landry Dimata, otra ha pasado más desapercibida pero no por ello carece de importancia. Se trata del retorno de Pol Lozano, quien llevaba cinco semanas esperando para tener minutos –ni en la Copa del Rey ante Osasuna los había conseguido– y que ingresó sobre el césped de Son Moix para cumplir con nota su misión de esta temporada: la de liquidador.
El canterano, que no ha sido aún titular en ningún partido de Segunda –sí en la Copa contra Llagostera y Burgos–, lleva en apariencia muy pocos minutos disputados en el campeonato liguero, solo 164’, y encima repartidos entre 14 jornadas distintas. Pero Vicente Moreno le ha otorgado un rol que rara vez falla: el de contribuir desde el mediocampo a cerrar partidos con el marcador favorable, tal como sucedió ante el Mallorca, cuando le dio entrada justo después del 1-2 y como sustituto de Raúl de Tomás, un cambio netamente defensivo. Funcionó.
Y ha funcionado en la mayoría de encuentros en que ha sucedido, a juzgar por los resultados que ha cosechado el Espanyol las veces que Pol Lozano ha tenido minutos: 11 victorias, dos empates y una derrota. Es decir, 35 puntos sobre 42, números de ascenso directísimo. La estrategia en realidad tan solo falló ante el Fuenlabrada, el único día en que el conjunto perico ha recibido un gol –que, además, alteraba el marcador– en su presencia.
No parece casualidad que el periodo más largo de Pol Lozano sin minutos haya coincidido con las derrotas ante Girona, Rayo Vallecano y Osasuna, este último en la Copa del Rey, además del empate frente al Lugo. Ni un solo triunfo. Si el sábado aparece ante el Sabadell, será sin duda una buena señal para el Espanyol.