Fernández ya busca su séptimo entrenador en cuatro temporadas

La decisión está tomada en principio, aunque se ha abierto un debate en el sportinguismo sobre la conveniencia o no de dar continuidad al trabajo de Miroslav Djukic en el Sporting. El presidente Javier Fernández no renovará al técnico serbio si no hay clasificación para el 'playoff' de ascenso.

Fernández se acogerá estrictamente al contrato de Djukic, que solo garantiza su continuidad clasificando al equipo para la promoción. Cuatro puntos es la distancia que separa al Sporting de la sexta posición a falta de dos jornadas --seis puntos en juego-- y la clasificación parece, por tanto, casi un sueño, milagrosa. Así las cosas, el presidente ha empezado a buscar el que será, salvo cambio de postura, su séptimo entrenador en cuatro temporadas de mandato.

Javier Fernández asumió la presidencia de la entidad en junio de 2016 en Primera División. Abelardo Fernández fue su primer técnico en aquella temporada que vio el primer relevo en el banquillo con la llegada de Rubi, que no pudo evitar el descenso. Ya en Segunda, Paco Herrera, Rubén Baraja, José Alberto López y ahora Djukic han completado una lista unida a otros tres nombres en la dirección deportiva: Nico Rodríguez, Miguel Torrecilla y Javier Rico.

Miroslav Djukic fue el recambio de José Alberto López allá por el mes de diciembre, para intentar en la segunda vuelta, primero, frenar la caída del equipo --a cuatro puntos del descenso y a siete del 'playoff''-- y después intentar llegar a la disputa final por el ascenso. Pues bien, los datos objetivos, irrefutables, que pueden orientar sobre el trabajo del entrenador dicen lo siguiente: el Sporting sería tercero en puntuación en una clasificación exclusivamente de la segunda vuelta, lo que le ha permitido sellar la permanencia a tres jornadas del final --el gran peligro que acechaba en enero--, se ha convertido en el segundo equipo menos goleado de la liga y se ha reducido la distancia sobre la promoción de siete a cuatro puntos en una competición muy igualada.

Los datos subjetivos que, por tanto, ya son objeto de debate son la mejoría del juego del equipo, evidente para la mayoría e insuficiente para los detractores de la labor del técnico. De igual modo, hay quienes consideran que Miroslav Djukic no es un técnico que mire hacia la cantera a pesar de haber sorprendido a su llegada con la incorporación de Bogdan o la apuesta definitiva por Pedro Díaz como eje fundamental en el juego del equipo.

El problema que se le presenta al Sporting la temporada que viene, como a la mayoría, es económico. El propio Djukic se ha mostrado públicamente dispuesto a ajustarse a las necesidades de la entidad. A pesar de ello, Fernández y compañía no parecen por la labor de renovar a un entrenador con el que ha habido un distanciamiento en el último mes por razones aún confusas y que se espera aclaren desde Mareo.

La derrota frente al Oviedo  ha sido el gran pecado de Miroslav Djukic y el que quizá le vaya a llevar por delante y poner fin a su etapa en Gijón. Tanto dolió ese resultado no solo en la afición sino también en la cúpula de Mareo que algunas fuentes apuntan que la ampliación del contrato del entrenador más allá del pasado 30 de junio, cuando expiraba, no se produjo hasta última hora porque se esperó en la entidad a conocer los resultados posteriores al derbi, es decir, en Vallecas (1-1), el 25 de junio, y ante el Lugo (2-0), el 28 de junio.

A la vista de esa circunstancia parece que el mensaje de Djukic en la rueda de prensa posterior al partido ante el Lugo en El Molinón tiene los destinatarios dentro del propio club. "Si entramos en promoción alguno tendrá que aguantarme en el Sporting. Igual fastidio a alguien", dijo el técnico, cortando al jefe de prensa, José Luis Rubiera, cuando estaba dando por finalizada la comparecencia.

Javier Fernández parece dispuesto a cambiar su modo de actuar respecto a anteriores ocasiones. En abril de 2013, tras la derrota del equipo en Sabadell (4-3), el ahora presidente y por entonces consejero bajo la presidencia de Manuel Vega-Arango, pero propietario de la entidad, convenció al consejo, al director general Alfredo García Amado y al director deportivo Raúl Lozano para acometer la renovación de José Ramón Sandoval por dos temporadas. El Sporting estaba a ocho puntos de la promoción que quedaba virtualmente descartada. Lo destituyó a la temporada siguiente.

Ya en la presidencia, Fernández apostó por la continuidad y por un proyecto de futuro en manos de José Alberto López a pesar de la caída del equipo. El Sporting disputó la promoción de ascenso con Baraja, pero acabó en la novena posición la pasada campaña de la mano del joven técnico asturiano, que siempre vio de lejos los puestos de 'playoff'.

"Tengo el futuro en mis manos, me encantaría seguir pero depende de los resultados", admitía el entrenador en una de sus últimas ruedas de prensa. "Intento terminar honradamente y luego otra gente tiene que decidir", comentó al término del partido frente al Málaga. Djukic parece resignado a su suerte.