Pulseras antiultras para los aficionados del club blanco

El Madrid estableció desde ayer un nuevo protocolo de seguridad para los partidos en el extranjero para evitar el acceso de los ultras. Una pulsera identificativa de color azul era requerida para los 2.400 madridistas, presentes en París, en todos los puntos de acceso al estadio. Los seguidores blancos debían pasar por el hotel Baltimore, cercano al Arco del Triunfo, para recoger su localidad nominativa presentando su documento nacional de identidad. Una vez con la entrada en mano, la seguridad del Real Madrid otorgaba esta pulsera al aficionado que autorizaba el paso en el triple control de acceso antes de entrar al estadio.

El club blanco ha tomado esta iniciativa siguiendo el artículo 16 y 25 del Reglamento de Seguridad de la UEFA (“los clubes y las agencias de viajes deben asegurarse de que las entradas de la afición visitante sean vendidas con nombres y apellidos”). De este modo, el club evita sucesos como los que acontecieron ante el Malmoe. Varios Ultras Sur viajaron a Suecia sin entradas y se hicieron con ellas a través de la reventa. Posteriormente no pudieron acceder al estadio porque se enzarzaron en una reyerta con radicales del Malmoe sueco. El club blanco se puso manos a la obra para evitar de nuevo este tipo de situaciones y ha impulsado este protocolo de seguridad puesto que, según el citado Reglamento de Seguridad de la UEFA, la responsabilidad del reparto de entradas del cupo visitante recae también en el club desplazado.

Alto riesgo. El Gobierno francés, además, refuerza la seguridad en los aledaños del estadio desde los atentados del pasado mes de enero. Son encuentros de alto riesgo. Había, por ejemplo, un primer perímetro de control a 200 metros del Parque de los Príncipes. Si no se enseñaba la entrada, la Gendarmería Francesa no dejaba ni siquiera acercarse a las puertas del Parque de los Príncipes...