El Racing de Munitis gana y se toma un respiro en la liga

El nuevo Racing de Pedro Munitis se impuso con claridad al Osasuna, con goles de Alvaro y Granero, en un partido en el que ambas escuadras buscaban un balón de oxígeno con el que corregir sus respectivas rachas de cuatro derrotas consecutivas y en el que los cántabros fueron mejores.

Primer test para los técnicos debutantes Jose Manuel Mateo, por el Osasuna, y Javier Pinillos, por el Racing, con dos apuestas similares que pasan por dar más mordiente ofensiva a sus respectivas escuadras, en el cuadro navarro con un juego más directo y el caso de los cántabros adelantando líneas.

Y en el banquillo del Racing la atención centrada en Pedro Munitis, quien, pese a actuar como segundo de Pinillos al no tener aún el título de entrenador nacional, comanda con Gonzalo Colsa el nuevo equipo técnico que sustituye al destituido Paco Fernández.

Desde el inicio la iniciativa fue del Racing, pero el primer disparo a puerta con cierto peligro lo protagonizó el Osasuna tras un saque de esquina que acabó a pies de José García, cuyo disparo desde la frontal del área lo atajó Germán, titular bajo los palos ante la baja del sancionado Mario Fernández.

El Racing no tardó en dar la réplica con un tiro lejano de Iñaki que sacó con apuros Santamaría. Para entonces, la nueva disposición de los locales parecía ser del agrado de la afición, que coreó el nombre de Pedro Munitis, así como el de Paco Fernández, como muestra de agradecimiento por las labores prestadas.

A diez minutos del descanso pudo adelantarse el Racing, cuando David Concha caracoleó en la media luna del área, para acabar encarando a Santamaría, que se le echó encima para blocar su disparo.

Y en los tres últimos minutos hubo tiempo para que Quique cabeceará fuera, solo ante Santamaría, para que Nino marrara la ocasión más clara de la primera parte al chutar desviado también solo ante el portero; y para que Alvaro García adelantara de cabeza al Racing ante la pasividad de la zaga osasunista.

Los locales no se replegaron tras el descanso y siguieron presionando al Osasuna y recuperando balones en campo de los navarros. En una de estas acciones forzaron un saque de esquina, que remató impecablemente Granero, de cabeza, para marcar el segundo gol de los cántabros.

A partir de ahí, el Racing no fue el equipo dubitativo de otras tardes en las que dejó escapar puntos en los minutos finales y siguió dominando a un Osasuna que apenas se acercó al área de Germán.