LEVANTE 3 - MÁLAGA 2
Salvó el honor el Levante pero en los cuartos se metió el Málaga
Horta y Recio sentenciaron antes del descanso, pero luego un doblete de Barral y un tanto de Juanfran sirvieron una remontada que sólo puso a salvo la dignidad levantina.
El Levante no está para muchas copas. Quizá olvidarse de esta competición que no le lleva a ningún sitio sea lo mejor que le podría pasar. Centrarse en la Liga, que falta le hace. En descenso, con una plantilla cogida con alfileres, que no da para más y que sigue esperando refuerzos que se le escapan día a día. El último precisamente Javi Guerra por el que lo intentaron tarde y mal y acabará jugando en Málaga.
Si había algún granota, ingenuo y soñador, que pensaba en pasar de ronda (en el club desde luego parece que no ya que desde que pitó el árbitro en La Rosaleda no se escuchó ni una sola vez la palabra remontada), pronto volvería a la realidad con el gol de Horta, que encontró una autopista por la derecha para batir a Jesús. Por bajo y por su palo. Sin dar más de tres pases seguidos y con Ochoa de mero espectador (otro partido sin tirar ni una vez a puerta los granotas), Recio anotó el segundo fusilando a Jesús en un balón muerto dentro del área sin oposición.
La segunda parte sobraba. La primera también, en verdad. Los 45 minutos interminables al menos tuvieron el aliciente de los insignificantes goles de Barral. El segundo, de gran factura tras maniobrar en el área sentando a un central malaguista y cruzando ajustado al palo. Tardía reacción que les sirvió, al menos, para ganar el partido con el postrero gol de Juanfran.