Liga Adelante | Alcorcón - Real Murcia

Kike se convierte en Ruso para tirar el fortín amarillo

Los de Bordalás son casi inexpugnables. Cristian es baja.

José A. Vera

Se habla mucho del Madrigal, del Mediterráneo... pero si hay un feudo en Segunda donde ya sales del vestuario con medio gol en contra, ése es Santo Domingo. Allí, en Alcorcón -encima con la dosis añadida de testosterona que siempre acompañan a los equipos de Bordalás- buscará el Murcia el más difícil todavía: derribar un fortín donde los números asustan, con 13 puntos de 15 y sólo dos goles en contra.

Quizá eso motive aún más a un Murcia que viene de derrotar al Elche (que no es poca cosa) y que por el camino ha perdido a dos de sus referentes ofensivos: Jonatan y Cristian. Siviero no vio a Cristian a tope y horas antes de partir la expedición grana le dejó en tierra. Llega la hora de Kike. No está para un partido completo por lo que entre el manchego y Chando, como refresco, tendrán que convertirse en Ruso para traerse un triunfo que le consolide en zona de playoff de ascenso.

Tagliafico, ¿al fin?. Con la baja de Jonatan Gómez y sin Emilio para hacer un trivote a Siviero se le abren dos vías, fortalecer el centro con Eddy o introducir a Tagliafico formando sociedad con Óscar Sánchez en la banda izquierda. Una propuesta esperada pero que aún no se vio en Liga.

En el Alcorcón Bordalás pierde a su capitán, Rubén Sanz, pieza clave en el mediocentro. Le suple Abraham y la única duda queda entre Miguélez y Kike López. En función de quien juegue el inspirado Juli hará de mediapunta o extremo izquierda. Partidazo.

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