Conjura rojiblanca para ganarle el 'derbi' al Castilla

En el vestuario del Hércules se tiene un cariño especial al Atlético. Pese a estar a muchos kilómetros del Calderón, el arraigo al conjunto colchonero es total. Hasta cinco jugadores con pasado rojiblanco conviven en la caseta herculana. Por eso, la cita del lunes ante el Real Madrid Castilla no es una más. Por lo ex del Atlético, suena a una especie de derbi.

Existe una conjura rojiblanca para tumbar al eterno rival. Camuflados con la camiseta del Hércules, Falcón, Cabrera, Diego Rivas, Fran Mérida y Braulio esperan saldar viejas cuentas pendientes que tiene el Atlético con el Madrid, aunque tenga que pagarlas su filial y el beneficiado sea el Hércules. "Jugar ante el Madrid siempre es bonito. Motiva mucho enfrentarte a esos jugadores y será un partido bonito. No pienso en si será especial o no, sólo quiero ganarles", asegura Fran Mérida, uno de los últimos en cambiar el Manzanares por el Rico Pérez.

De los cinco exatléticos, tres de ellos, Falcón, Diego Rivas y Braulio, mamaron la cultura rojiblanca desde pequeños. Se formaron como colchoneros para luego explotar en otro lugar. Sin embargo, sus corazones siguen teniendo tintes rojiblancos y laten con más fuerza cuando enfrente está esa elástica blanca. Cuestión de rivalidad.

Ha formado el Hércules su columna vertebral con piezas atléticas. García Pitarch, precisamente también con pasado colchonero, echó sus redes este verano en el Calderón para traerse a Fran Mérida y Cabrera. Ni el mediapunta catalán ni el central uruguayo vistieron en muchas ocasiones la rojiblanca, pero sí saben lo que significa tener enfrente la camiseta del Madrid, aunque la luzcan sus cachorros. "Jugar ante el Castilla es igual de importante que hacerlo ante otro equipo. Pero quiero que los colchoneros queden siempre arriba", bromea Cabrera, el único que tiene contrato en vigor con el Atlético.

Falcón, Cabrera, Diego Rivas, Fran Mérida y Braulio no saben lo que es jugar un derbi de verdad, el Alético-Madrid. El lunes, al menos, podrán vivir su clásico particular. La sucursal atlética en Alicante reta al filial blanco.