Liga BBVA | Hércules 4 - Atlético 1

El Hércules humilla al Atlético

Tote, Valdez, Thomert y Trezeguet golearon en 45 minutos al bochornoso equipo de Quique

DECEPCIÓN. Assunçao y Reyes asisten incrédulos al repaso del Hércules mientras que el equipo alicantino celebra su segundo gol.

Podía ocurrir en cualquier partido y sucedió anoche en Alicante. El Atlético había anunciado su intención de negarse a jugar los lunes. Y comenzó ayer su plante. Si tienes el chiringuito sujeto con cuatro palos, se te desmonta el sombrajo cuando sopla una brisilla. Encima ayer el Hércules fue un torbellino y, liderado por la clase y la zurda de Tote, humilló al equipo de Quique Sánchez Flores.

Le bastaron 45 minutos al equipo de Esteban Vigo para bailar al Atleti. Todo empezó cuando entre Filipe Luis y Domínguez quisieron emular al lesionado Perea y la pifiaron al alimón a cinco metros de la línea de gol. Porfió Tote y se llevó la pelota y se la metió, con la diestra, por un hueco mínimo a De Gea.

A partir de ahí, el Hércules empezó a tocarla, a asociarse, a presionar, a buscar la portería colchonera con buen gusto y ahínco. Y la encontró. ¡Vaya si la encontró! Cualquiera de los tres goles que obtuvo a continuación podrían votarse en la gala de entrega del Balón de Oro como mejor gol de 2011. El zurdazo a la escuadra de Valdez, el cabezazo impecable, marcando los tiempos, de Thomert a centro medido de Peña, y el remate al primer toque de Trezeguet a pase al área de Tote. Tres dianas preciosas, a las que tampoco pusieron excesiva oposición ni Godín ni De Gea ni ningún zaguero rojiblanco. Kun Agüero tocó la primera pelota en el minuto 42. Eso lo dice todo. No fue un naufragio de la defensa y el portero, fue un desastre generalizado de los once que lucían las históricas y centenarias rayas rojas y blancas.

El sueño de Tote era, y es, jugar en el Atlético. Tuvo que salir de la cantera colchonera cuando la quitaron en el 92 y se hizo futbolista de Primera en la cantera del Madrid. Desde entonces ha esperado la llamada colchonera para cumplir su sueño de jugar con la rojiblanca en el Manzanares. Paradojas del destino, ayer lideró una de las mayores humillaciones al Atlético de visitante que se recuerdan en 45 minutos.

Sin reacción. Kun Agüero tiró de orgullo y tocó más balones en los cinco primeros minutos de la segunda parte que en toda la primera parte. Llegó a estrellar un balón en el poste en una falta lateral que se pidió tirar. Reyes también se espabiló algo y se encontró a Calatayud. No había manera de reducir distancias y Peña tuvo el 5-0 en otro disparo al poste.

El Hércules gerenciaba sin excesivo esfuerzo la ventaja y el Atlético dominaba de manera estéril. Quique metió a Mérida tras el descanso, mandó después a Koke a los leones y tardó algo más en poner a Forlán. Reyes hizo el gol del honor. El Atlético puede salvar la temporada si elimina al Madrid en Copa. Si no lo consigue, el objetivo de la cuarta plaza será difícil de alcanzar. Y la continuidad de Quique, complicada. Como pasó con Abel. Y el problema no está ahí...

Lo más visto

Más noticias