Esperando a Forlán

El arranque liguero del Atlético no ha seguido el guión previsto por sus dirigentes y sus técnicos. No se ha conseguido la regularidad ansiada y el equipo de Quique no puede permitirse un tropiezo hoy ante un Osasuna que en los últimos años siempre le crea problemas de visitante.

Tampoco se caracteriza el equipo de Camacho por su regularidad, especialmente fuera de casa, pero su posición en la tabla, a seis puntos de los puestos de Champions y a cuatro de los de descenso, comparada a la del Atlético, a seis puntos de los puestos de descenso y a cuatro de los de Champions, arrojan el dato de que a Atlético y a Osasuna sólo les separan dos puntos. No es un dato excesivamente sintomático después de diez jornadas disputadas, pero, en todo caso, es más preocupante para el Atlético.

En el Atlético todos esperan a Forlán. El uruguayo personifica el irregular inicio colchonero. Su estado de forma, muy distante a su potencial, unida a la ausencia de Agüero por lesión, han mermado las diferencias del equipo colchonero respecto a rivales a los que es superior. Con Forlán y el Kun enchufados, el Atlético es rotundo favorito ante Osasuna, siempre un rival incómodo que vende cara la derrota.

Quique niega que haya caso Forlán. El uruguayo tampoco ha escenificado un enfrentamiento que también niega con rotundidad el presidente Enrique Cerezo. Se supone que los goles cerrarían un caso inexistente para los protagonistas, pero que recuerda a numerosos capítulos de autodestrucción surgidos en el seno del equipo del Manzanares en los últimos años. Cuanto más tarde en regresar el verdadero Forlán, más problemas tendrá el Atlético para huir de los fantasmas del fatalismo.

De convivencia.

Camacho se ha traído a Osasuna a Madrid dos días antes del partido. El jueves les montó una cena de convivencia en Casa Juan. Después de perder ante el Racing, Camacho se echó la culpa por no haber motivado a su equipo, los mismos que ganaron con solvencia la siguiente jornada. En el Calderón los equipos no necesitan motivarse. Ricardo, menos.

12 expulsados en los 10 últimos duelos entre ambos en el Calderón

El Atleti-Osasuna tiene tendencia a ser un duelo de alta agresividad. En los últimos diez duelos de ambos equipos en el Calderón han habido doce expulsados. En estos diez enfrentamientos, cinco fueron jugadores del Atlético y siete del conjunto navarro. En el último, el 14 de marzo de este año, el único que vio la roja fue Simao. El portugués recibió dos amarillas por dos durísimas entradas. Curiosamente, Raúl García vio la tarjeta roja en el Calderón, pero vistiendo la elástica rojilla. Fue en un 1-0 en el que Osasuna acabó con siete jugadores, el 21 de enero de 2007.