Florentino disfrutó mucho ganando a su gran rival

Junto a los partidos de Copa de Europa, los encuentros contra el Atlético de Madrid son los que más gustan a Florentino Pérez. Como en su infancia y juventud, considera al Atlético el gran rival del Madrid, vive los derbis con gran intensidad en el palco y ayer no ocultaba la satisfacción en su rostro cuando llegaron los dos goles blancos.

El presidente del Real Madrid pegó una colleja cariñosa a Miguel Sebastián, ministro de Industria e hincha del Atlético, cuando marcó Özil, y dispensó una sonrisa pícara a Enrique Cerezo, además de chocar la mano con su esposa Pitina.

La comida entre directivas, celebrada en el restaurante Puerta 57 del Santiago Bernabéu, transcurrió con gran armonía y los dirigentes del Atlético destacaron el trato exquisito que les dispensaron sus anfitriones. Enrique Cerezo decidió emular a Florentino y no hizo declaraciones.

El presidente rojiblanco se lamentó tras el partido de otra oportunidad perdida, aunque estaba muy satisfecho con el juego de su equipo. Jaime Li-ssavetzky, madridista reconocido que no ha querido frecuentar el palco del Bernabéu por su condición de secretario de Estado para el Deporte, ayer sí estuvo en la zona noble del estadio blanco iniciando su nueva faceta de candidato a la alcaldía de Madrid. Por cierto también estuvo en el palco el ex presidente Fernando Martín.

Jorge Valdano, director general del Real Madrid, fue a felicitar a Quique Sánchez Flores a la zona de vestuarios y le dijo al técnico del Atlético que habían sido el rival más incómodo que ha tenido el Real Madrid. Lo mismo que dijo Mourinho en conferencia de prensa.