La Real no gana fuera en la segunda vuelta

La Real es menos líder lejos de San Sebastián. Es es la conclusión lógica que se debe sacar del nuevo tropiezo a domicilio, esta vez en el Nuevo Colombino, del equipo donostiarra. Los de Martín Lasarte muestran dos realidades muy distintas. Por un lado, la de Anoeta, donde son intratables con 12 victorias, sólo una derrota y dos empates. Por otro, la de los encuentros como visitantes, donde llevan toda la segunda vuelta sin saber lo que es la victoria. Este dato negativo preocupa, y mucho, en el entorno realista.

Por si todo esto fuera poco, la Real es ya el segundo equipo que más goles recibe como visitante de todos los aspirantes al ascenso. Es algo que, sobre todo, ha aumentado en las dos últimas jornadas fuera, en las que ha recibido cuatro goles y no ha marcado ninguno. En toda la segunda vuelta, lejos de Anoeta, la Real sólo ha sumado tres puntos de 18 posibles con tres empates y tres derrotas marcando apenas dos goles. Se trata de números muy negativos para un equipo es el líder actual de la categoría de plata y que quiere subir a Primera como único objetivo de la temporada.

Tan extraña es esta imagen de Doctor Jeckyll y Mr. Hyde que ni siquiera dentro del vestuario encuentran una explicación válida: "No lo entendemos bien, ni nos explicamos tampoco lo que pasa. Igual en casa, con el público a favor, hemos cogido una sintonía buena con ellos y eso nos empuja hacia la victoria. Fuera de nuestro campo, al ir como líderes, quizá nos cuesta más", seguró el guardameta Riesgo.

Riesgo, listo para su regreso

El destino está siendo caprichoso con la Real y su portería. Tras lesionarse Bravo y elegir Lasarte a Zubikarai, tendrá que ser Riesgo el que juegue ante el Albacete al ser expulsado el de Ondarroa. Riesgo lleva desde noviembre sin jugar un partido oficial y no esconde su deseo de volver: "Estoy tranquilo y con muchas ganas. No siento ninguna presión de tener el listón alto, sólo quiero ayudar y aportar todo lo que pueda. Lo veo como una gran oportunidad".