Liga BBVA | Valladolid

"La cómoda situación puede quitarnos hambre"

Búsqueda de explicaciones a una situación que nadie esperaba. Ocho partidos sin ganar y siete sin marcar han encendido las luces de alarma. Los integrantes de la plantilla explican sus sensaciones y Toni Ruiz, mano derecha de Mendilibar, salta a la palestra.

José Luis Rojí

Las críticas han llegado y las miradas están puestas sobre el equipo. El responsable de la parcela física y mano derecha de Mendilibar, Toni Ruiz, salta a la palestra desde el momento en que algunos jugadores indicaron, tras medirse al Numancia, que al equipo le falta chispa: "No estamos frescos, un poco física y también mentalmente. No estamos jugando como hace dos meses. Lo hablamos e intentamos buscar soluciones, y la conclusión es que es más mental que físico. Todos los equipos llegan cansados a esta fase de la competición. La situación cómoda en la clasificación desde hace dos meses puede hacer que pierdas el hambre de ir a por los partidos. No estamos bien".

Sin embargo, al equipo se le ve entrenarse bien cada día, con la intensidad habitual, pero en los partidos algo no funciona; Toni Ruiz también lo entiende así: "Llega el partido y es otra cosa. Cuando juegas contra equipos que se juegan la vida y tú no tienes esa necesidad, normalmente ganan ellos. Nos pesa la losa de los malos resultados; si hubiéramos obtenido un buen resultado en Riazor, todo habría cambiado".

Cambio de rumbo.

Parece imprescindible salir de la dinámica y volver a hacer las cosas bien: "El equipo tiene la sensación de que corre, pero corre mal, a destiempo, tarde; eso no es un tema físico, sino mental, de saber leer el partido. Es una cuestión de inseguridad. Queríamos hacer un buen partido y dar una alegría a la afición, y todo esto pesa, y más sabiendo que en la clasificación estás cómodo. Todo es una suma de factores".

Aún así, parece un contrasentido que la tranquilidad en la tabla impida desarrollar un juego mejor: "Se tiene que ver más alegría jugando, intentar cosas. Puede ser un contrasentido, pero es la realidad. Cuando salimos a jugar, y yo ante el Numancia lo vi en los primeros cinco minutos, no estamos en el encuentro, no es el equipo que ha trabajado durante la semana. No encontramos nuestro fútbol de intensidad, de ritmo y de presión. Esto ocurre en el minuto cinco, cuando aún no estamos cansados. Es un tópico, pero si ganamos al Racing, los otros dos tendremos otra mentalidad, más libre. Hemos hecho un buen año, pero está quedando la idea de una mala sensación que no debe ser así, porque a todos los campos a los que vamos nos felicitan por la campaña realizada. Somos los primeros en querer jugar bien y ganar".

Si todo es mental, igual habría que buscar ayuda psicológica, como dice el preparador físico: "La falta de objetivos baja el rendimiento de manera inconsciente. Los resultados y la falta de goles le pesan al profesional. Quieren hacerlo bien, pero hay factores que no se lo permiten y las cosas no salen". Además, el equipo es poco reconocible, por sanciones, lesiones y decisiones técnicas: "Son circunstancias que no podemos evitar. Con los cambios, el equipo no funciona igual. El que entra, sabe que el equipo no funciona y las carencias se notan más. Es un círculo del que cuesta salir".

Lo más visto

Más noticias