El Poli ridiculiza a una Real que no sabe a lo que juega

Esta Real no es la Real. No puede serlo. No se engañen, jugarán vestidos de blanco y azul, llevarán el escudo de este histórico y querido club, pero no es la Real. Que no, que no puede ser que un Poli Ejido que llegaba colista tras recibir dos goleadas seguidas, con una defensa diezmada y muchas carencias en el centro de campo, se plante en Anoeta y juegue sin complejos, como si de un Real Madrid se tratara, con un equipo txuri-urdin sin alma, espíritu ni convicción. Puede parecer surrealista, pero no se le puede poner ningún pero al triunfo del Poli en San Sebastián. Un resultado que hunde un poco más a una Real triste y sin ideas y pone más en entredicho el proyecto de una directiva que volvió a salir entre pitos y gritos de dimisión de Anoeta.

Se podrán poner mil excusas, se podrá decir que el Poli fue superior en la primera parte y que en la segunda salió a verlas venir. Que realmente los andaluces no crearon ocasiones clarísimas, que tras el descanso la Real se quitó los complejos, dominó y monopolizó el balón. Que sí, pero no valen cuando el primer disparo entre los tres palos de los realistas llegó en el minuto 68 en un remate al larguero de un batallador Díaz de Cerio a pase de un magistral Xabi Prieto, sorprendente suplente por no renovar su contrato y que fue el único que llevó peligro con sus acciones. ¡Está la cosa como para dar ventaja a un Poli! Y mientras eso ocurría, mientras la Real sólo lograba hilvanar una buena jugada, los andaluces obligaban a Riesgo a lucirse. El Poli respira y la Real ¿a qué juega la Real?

Coleman

"Es muy difícil pedir paciencia cuando pasan cosas así, lo sé y lo siento. Entiendo el enfado y la frustración de la gente al salir de Anoeta".

Luis César

"Sabía que la primera victoria debía llegar pronto, hemos venido a todo un Anoeta a quitarle el balón a la Real. La victoria es justa".