Glazer quiere recuperar a Becks para el Manchester

Malcolm Glazer, el multimillonario norteamericano que se ha convertido en el nuevo dueño del Manchester United, está decidido a fichar a Beckham como primer paso para reconciliarse con la afición del club inglés, de uñas contra él por la compra del equipo. Eso al menos es lo que público ayer la página web goal.com, que incluso señalaba que Glazer ya había preguntado a Alex Ferguson su parecer sobre el asunto.

Glazer tiene mucho dinero para fichajes pero ahora mismo es difícil que pueda devolver a Beckham a Old Trafford. En primer lugar porque Ferguson, pese a oponerse a la entrada del norteamericano, ha anunciado que se queda en el club, a condición de que no se entrometan en lo deportivo. Y Fergie no sólo considera la marcha de Beckham como un acierto comercial, sino que además su relación personal se rompió cuando el United aceptó la oferta del Madrid. De hecho, como el jugador reconoció a AS hace unas semanas, desde entonces no se han vuelto a hablar ni por teléfono.

Es feliz. Luego está el detalle más importante: Beckham ha superado los obstáculos que le impedían disfrutar de su estancia en España y la fiesta de su 30º cumpleaños (que se celebró en Madrid y no en Londres) es la prueba definitiva. El fútbol de Luxemburgo encaja con su estilo y hace meses, o incluso años, que no se sentía tan bien físicamente. "Quiere ganar algo importante con el club", afirmó a AS una fuente del entorno de Beckham. "Es tan feliz en Madrid que incluso está tomando el tipo de decisiones familiares y patrimoniales relacionadas con una estancia muy larga".

El cuarto galáctico costó sólo 25 millones de euros

David Beckham fue el cuarto galáctico de la 'era Florentino'. El 17 de junio del año 2003 se consumó la contratación del crack inglés, en una operación relámpago que el Madrid hizo pública al tener que informar el Manchester United a sus accionistas del sonado traspaso. El acuerdo se cerró en 25 millones de euros y 10 más que incluían una variable en estas dos últimas temporadas por si los blancos ganaban la Liga y la Champions. Como no ha sido el caso, al final el fichaje de David salió mucho más barato que el de Figo (60 millones de euros), Zidane (78) y Ronaldo (45). Becks dio el "sí, quiero" a Florentino cuando éste le telefoneó desde el Txistu antes de un derby madrileño. "¿David, quieres jugar en el Madrid?". Beckham respondió sin dudar: "Yes, presidente". Y hasta hoy...­