Roglic: “¡Bendito problema!”

En la llegada de Laguardia, junto en La Rioja alavesa, con el cultivo de la vida predominando alrededor de la llegada, los aficionados se hacían una pregunta. “¿Ganará Roglic? Porque el final es muy bueno para él...”, se escuchaba. El esloveno, junto a Alaphilippe y Hayter, entre otro, se postula como uno de los favoritos, pero estaba a la orden del día las posibles dudas sobre su rendimiento.

Confirmó su presencia en La Vuelta casi a última hora, tras su caída y posterior abandono con lesión en el Tour, pero él mismo avisó en Países Bajos. “Estoy aquí, eso quiere decir que estoy listo”. Razón no le faltaba: cuarta etapa, primera victoria (décima en total) y primera piedra puesta para lograr su cuarta Vuelta consecutiva. Durante las jornadas neerlandesas, el esloveno evitó el liderato, especialmente el primer día, en la crono por equipos, que entró en segundo lugar.

Una vez llegó la carrera a suelo español, y más con un recorrido tan sinuoso, no dejó margen a sus rivales. “¿Ser líder ya desde tan pronto? ¡Bendito problema”, destaca el del Jumbo, cuarto líder distinto en lo que llevamos de Vuelta... y todos son compañeros: Gesink, Teunissen, Affini y ahora Primoz. “EL plan del equipo desde el principio era cambiar de líder cada día. Esta vez me tocó a mí. Vinimos con el plan de tener el maillot rojo el último día en Madrid y la situación ahora se dio así”, destaca el triunfador.

Los comentarios en la meta de Laguardia eran comunes: “¿Y ahora quién es capaz de quitar el liderato a Roglic?”. Bien es cierto que quedan, nada más y nada menos, que 17 etapas, y que se generó el mismo debate cuando Pogacar se colocó de líder en la primera semana del pasado Tour, pero el esloveno se muestra fuerte.

“Disfrutaré estos momentos de vestir de líder con el equipo. Veremos si mantengo el maillot de líder hasta el último día. No me importa mucho eso. Lo que importa es tenerlo en Madrid”, incide sobre llegar al 11 de septiembre al centro de la capital vestido de rojo. Con diez etapas en su palmarés en la ronda española, Roglic reconoce que “es una locura”: “Al final sentí que tenía piernas y decidí ir a por ello”, añade. Ya avisó de su poderío al coronar primero el puerto bonificado antes de poner rumbo a meta

Ahora, el Jumbo tendrá el mando del pelotón, especialmente en esta primera semana que hará una criba importante en la general. Hoy, para empezar, en el recorrido exigente hasta Bilbao, Roglic lucirá el maillot rojo por 37º día. Una etapa en 2019, cuatro en 2020, cuatro en 2021 y, por ahora, una en 2022. En todas sus participaciones en La Vuelta, Roglic logró triunfo de etapa y general. Veremos esta vez.