Maté: “El ciclismo es hermético y la Titan Desert me aporta mucho”

A sus 39 años, Luis Ángel Maté sigue incombustible, compitiendo con alegría y transmitiendo la misma pasión por este deporte que cuando dio sus primeras pedaladas. En los últimos tiempos, el andaluz, muy cerca de formalizar su ampliación de contrato con un Euskaltel al que llegó en 2021, compagina la carretera con la adrenalina del mountain bike, toda una liberación mental para él. Esta semana completó su segunda Titan Desert de Almería consecutiva, en la que se llevó el honor de firmar el mejor tiempo en la subida al temido Velefique (acabó 6º en la general). Allí habló con AS sobre este tipo de retos, además de confirmar el fichaje de su todavía compañero Carlos Canal por el equipo Movistar.

—Esta ha sido su segunda Titan Desert de Almería. ¿Cómo ha vivido la experiencia?

—Es una experiencia muy bonita, porque me sirve para romper un poco con el hermetismo que ha llegado al ciclismo profesional en los últimos años. Tengo la suerte de que el equipo me permite hacer este tipo de pruebas y para mí a estas alturas de mi carrera son muy importantes. El ciclismo se ha tecnificado mucho en los últimos años, ha traído muchas cosas buenas, evidentemente, pero también otras no tan buenas. Estamos muy cerrados, estamos en el bus, vamos a firmar, luego en carrera los equipos van todos en fila, prácticamente ya ni se habla, ya no con el público sino entre los propios ciclistas. Me da un poco de pena, porque al final estamos olvidando un poco los orígenes de nuestro deporte. El ciclismo es el deporte del pueblo y es un error perder ese contacto con la gente, con el público. La bicicleta es el mejor vehículo socializador que existe en el mundo porque nos iguala a todos y si no pedaleas independientemente de tu condición social o étnica la bici no avanza. Ese es el gran activo y el gran valor de nuestro deporte. Venir aquí y compartir tiempo con gente que está haciendo retos, que busca su tiempo en sus vacaciones para venir, charlar con ellos, gente que trabaja toda la semana y entrena una hora al día en el rodillo para poder venir en sus vacaciones... eso es muy importante, me aporta mucho y es una experiencia muy bonita para mí.

—Hablando de aportar, más allá de esa libertad o del contacto directo con conocidos y aficionados, ¿qué otras cosas le aporta una carrera como la Titan Desert?

—Estamos en una sociedad en la que se da mucho valor a los ganadores, al resultadismo, y yo en esta carrera encuentro muchos ganadores, no ganadores que hayan quedado los números uno en la carrera, los primeros, sino personas que merecen toda mi admiración por los sacrificios que hacen para poder venir aquí, por conciliar una vida laboral con una actividad física saludable como es el ciclismo, gente que supera lesiones y viene aquí, eso para mí son ejemplos de vida, ejemplos de ganadores y en los cuales fijarse. Poder pedalear y compartir con ellos esta experiencia es muy bonito, sobre todo apartar un poco ese resultadismo que mata un poco la motivación intrínseca, que es la que realmente te tiene que mover para hacer un deporte como el ciclismo.

—¿Qué tiene la Titan, aparte de ramblas infernales, subidas dificilísimas y senderos muy técnicos, para enganchar a más gente cada año?

—Tiene unas posibilidades tremendas en un entorno con una variedad increíble. El primer día salimos por el Cabo de Gata al amanecer en un sitio extraordinario. Hemos estado en la Sierra de los Filabres, subiendo Velefique, llegando prácticamente hasta Calar Alto; las ramblas, el desierto de Tabernas... Precisamente esa variedad en la que puedes encontrar un poco todo con una temperatura muy benévola para las alturas de año que estamos, con mucho sol y yo creo que es una carrera con unas posibilidades tremendas.

—Más allá de Almería, el próximo noviembre arranca una nueva edición de la Titan de Arabia. ¿Se animará en el futuro a probar suerte?

—Sí que me gustaría, la verdad, porque solo conozco la Titan de Almería y es una experiencia que me gusta mucho, que me ha sorprendido, que me aporta. Seguro que haré más Titan.

—Pese a su veteranía, como demostró recientemente en Portugal, sigue consiguiendo algún triunfo y rindiendo a buen nivel. ¿Nos queda Maté para rato?

—Mucho, mucho no (risas), porque al final tengo 39 años y por pura biología no me puede quedar mucho, pero siempre seré ciclista y aunque la licencia no sea profesional, siempre seré ciclista, siempre estaré pedaleando, siempre estaré usando mi bicicleta para encontrarme a mí mismo, para moverme en mi ciudad, para hacer una vida más saludable.

—A final de 2023 termina contrato con Euskaltel. ¿Su intención es la de continuar en el equipo?

—Sí, todavía no lo hemos formalizado, pero en el equipo me encuentro muy bien, me dan exactamente lo que necesito, me siento muy valorado y eso es muy importante. Probablemente en otro equipo no hubiera podido seguir tanto tiempo, dilatar tanto la carrera como aquí.

—Hablando de la estructura de Euskaltel, ¿cómo ve el futuro del proyecto para los próximos años?

—Ahora se están empezando a recoger frutos de un trabajo muy bueno de cantera que se está haciendo. Hay jóvenes que han dado ya esta temporada un nivel muy bueno, como Enekoitz Azparren, que ha estado en la Selección; Xabier Berasategi, que es un chico que ha hecho muy pocos días de competición pero con unos resultados espectaculares. Viene de hacer octavo en Trofeo Matteotti, en Italia, y todas las actuaciones que ha tenido han sido muy buenas. El equipo va creciendo, va dando pasitos. También hay corredores ya más contrastados como Joan Bou, que viene de hacer muy buen Tour de Malasia; Gotzon Martín... Al final, no dejamos de ser un equipo de formación. Carlos Canal ha hecho una temporada extraordinaria y pasará a Movistar. Creo que el balance hasta el día de hoy es positivo y a medio plazo estos resultados y este balance nos hace ser halagüeños y continuar con la filosofía que tiene el equipo. Creo que hay muy buenos mimbres para hacer una temporada 2024 muy bonita.

—¿Qué planes u objetivos se fija para la temporada que viene?

—Sobre todo, seguir disfrutando de la bici, del profesionalismo y poder transmitir lo que a mí me ha dado el ciclismo. Por suerte, en el equipo tengo gente que me escucha y que me atiende, que eso es importante. El objetivo es seguir disfrutando de la bici e intentar transmitir los conocimientos que haya podido adquirir en estos años.