Valverde y Nibali, una despedida 2.0 ante el delirio japonés

Las céntricas calles de Saitama, junto a la estación de metro (Shintoshin) estaban abarrotadas en las calles del sábado. Cientos de aficionados al ciclismo se dieron cita en el Saitama Arena, que también acogía en otra de sus partes un concierto de la banda Guns N’Roses. Es decir, la localidad, prácticamente a las afueras de Tokio, vibraba por todos los lados, y especialmente con el elenco de estrellas ciclistas que se daban cita para el Criterium de este año, el primero que permite la pandemia en tierras niponas desde 2019. Este domingo se celebrará (6:45 en España, TDP), pero antes, durante el sábado, los corredores tuvieron una jornada de disfrute, ocio y visitas por la zona, con dos ciclistas con muchos focos: Alejandro Valverde y Vincenzo Nibali.

Los dos, de los grandes destacados en especial de este siglo, se retiraron oficialmente el pasado mes de octubre en el Giro de Lombardía. Ahora, aunque no sea en competición, siguen pedaleando, se resisten a dar por terminada la temporada, de todas las maneras... aunque cada vez queda menos. Pese a que Valverde (en Japón está junto a Enric Mas, Erviti y Rojas) acudirá en unas semanas a Costa Rica para el Giro de Rigo, tanto para el colombiano como para el siciliano esta es una nueva despedida. Ambos, acompañados de Marcel Kittel, retirado también pero embajador de la cita, recorrieron puestos de comida local, probando todo tipo de alimentos y bebidas. Así pasaban la mañana, aunque Valverde prefirió comer un helado para rematar. Mientas, otros como Vingegaard, Kuss y Kruijswijk acudían de visita al Cocoon City, y otros como Cavendish y Geschke disfrutaban montando en bicicleta con críos en el Cycle Festa.

Toda una mañana de relax y sonrisas que siguieron por la tarde, en la presentación: todos los corredores participantes se pusieron el yukata, la vestimenta típica de la zona, y el evento estaba dedicado especialmente a Vingegaard y Froome, por un lado, y Valverde y Nibali, por otro. Ambos, en una pequeña competición con diversos juegos (adivinar etapas del pasado Tour, adivinar en un mapa donde parte la edición de 2023, dibujarse así mismo celebrando un triunfo y hasta hacer algodón de azúcar) y la victoria fue para la dupla italo-española, aunque el Bala lo reconocía: “Ganamos gracias a Vincenzo”.

Un buen ambiente que se prolongará este domingo, en el que se esperan miles de aficionados, como vaticinó el ídolo local, Yuyika Arashiro, ganador de la última edición en 2019: “Fue una larga espera de tres años, pero toda Japón vibrará con la prueba”, avisa el del Bahrain. La prueba principal constará de 17 vueltas a un circuito 3,5 kilómetros. “Es muy bonito cerrar este ciclo aquí”, coinciden Valverde y Nibali. Seguro que este domingo volverán a tener su dosis de protagonismo. “Atacaremos a dúo”, dijeron ambos entre sonrisas. Lo que no quiere decir que sea mentira...