CICLISMO | MUNDIALES

Pello Bilbao: “No hay excusas, es el Mundial perfecto para España”

El vasco (34 años) afronta su segundo Mundial tras varios años de ausencia con la Selección. “Es realista pensar en una medalla”, dice en AS.

Zúrich
RFEC

Después de cuatro años de ausencia en un Mundial de ciclismo, los caminos de Pello Bilbao (34 años) y la Selección española vuelven a unirse. En el pasado quedan los recorridos poco propicios, las diferentes preparaciones, ahora es momento de darlo todo en la prueba de fondo en Zúrich, como bien admite el corredor vasco para AS sobre una cita en la que España puede soñar con un gran resultado.

—Tras varios años de ausencia, regresa a la convocatoria de un Mundial. ¿Cómo afronta el reto?

—Llego justo en el momento ideal. Le dije a Pascual que iba a llegar bien, que confiara, aunque el Tour no salió bien. Después las siguientes carreras como Polonia las tomé un poco como preparación, sabía que no estaba competitivo, pero iba de nuevo en crecimiento y justo a tiempo en Montreal ya vi que estaba al 100%, fresco y preparado, sobre todo para afrontar una carrera exigente de un día. En general también se puede decir que el equipo llega en un momento dulce, que todos los integrantes llegamos con muy buenos resultados en nuestras últimas carreras y creo que es un acierto. Después habrá que ver cómo engranar todo esto, porque claro, si todos nos sentimos fuertes no será tan fácil organizarnos en carrera. Pero bueno, seguramente todos estemos muy cerca de nuestra mejor versión.

—La parte más experimentada de este equipo, de la que forma parte, se conoce bien y eso juega a favor de España.

—Sí, somos viejos conocidos: Alex, Mikel, Enric, sobre todo, Carlos, que casi se le puede considerar como veterano. Sí que llevamos muchos años juntos y todos nos conocemos. En ese sentido tenemos algo de ventaja.

—A estas alturas de su carrera, ¿siente responsabilidad por liderar a esta Selección?

—No soy el único que está en esa posición. Al final, Mikel también es un corredor veterano, tanto como yo, y con gran experiencia, o incluso Carlos, Álex… Es gente que tiene mucho recorrido y creo que es una responsabilidad a repartir, no sería fácil de mencionar un solo capitán en un grupo como el que tenemos aquí.

—Por lo bien que se adapta el recorrido de este Mundial a todo el grupo, ¿sentís más expectación que otros años por hacerlo bien?

—Creo que sí, yo al menos la siento, porque veo que es una oportunidad de oro para nosotros y no se puede desperdiciar. Somos conscientes de que hay un par de corredores que quizás se salgan del mapa en este tipo de carreras, pero el resto son alcanzables y sobre todo tenemos un bloque muy potente para este tipo de recorrido y lo tenemos que aprovechar. Los últimos mundiales no fueron buenos, quizás porque los recorridos tampoco nos dejaban tanto margen, pero en esta ocasión no ponemos ninguna excusa, es el mundial perfecto para nosotros.

“Es realista pensar en una medalla”

Pello Bilbao

—Ponga nombre y apellidos a esos dos corredores que están por encima del resto.

—Está claro que Tadej (Pogacar) en todo lo que ha competido este año ha sido inmensamente superior al resto. Y Remco (Evenepoel) en carreras de un solo día, como ha demostrado en mundiales anteriores o en los Juegos este mismo año, es un corredor de gran fondo. En este momento, quizás están estos dos nombres por encima del resto.

—¿Hay forma de sorprenderles en este recorrido?

—Habría que buscar la debilidad de sus equipos, que la carrera sea lo más descontrolada posible, que se hagan grupos tempraneros, que fuercen mucho a sus equipos a controlar la carrera. Se trata de desgastar e intentar sorprender de lejos, porque si llevan la carrera atada dentro de los últimos 40 kilómetros ya es casi imposible sorprenderles.

—¿Qué tipo de carrera conviene más a España?

—Es complicado. Lo que necesitamos es intentar conocer cómo quieren controlar la carrera, unirnos con otras selecciones que puedan tener intereses similares a nosotros. Buscar ese interés común e intentar adelantarnos, pero siempre buscando una buena colaboración con otros corredores que quizás no sean los máximos favoritos, pero que estén en un buen estado de forma.

—¿Qué resultado significaría firmar un buen Mundial para esta Selección?

—Creo que es realista pensar en una medalla. Pensar en el maillot arcoíris sería excesivo, aunque siempre que estés peleando por las medallas puede suceder, pero yo creo que tenemos que ser ambiciosos y optar por una plaza en el podio. Quizás nos tenemos que conformar con un puesto entre los 10, pero quedar más atrás que eso ya sería un mal resultado, sinceramente.

El equipo español, con Castrillo y Ayuso a la cabeza, en un entrenamiento en Zúrich.RFEC

—Cosas más raras se han visto en un Mundual.

—Sí, es una carrera un pelín más impredecible por el factor de que los conjuntos al final no estamos trabajando durante todo el año, se forman días antes y al final no sabes cómo y hasta dónde puede dar cada corredor. En esas situaciones es fácil que sucedan las sorpresas. Que un grupo con Roglic y un par de corredores que puedan ser una buena baza de su selección tiren adelante, Eslovenia quizá juegue a pensar que ese es el movimiento bueno y quién sabe si pueden llegar. No es tan fácil como en otra carrera llevar el grupo compacto hasta el final y que se decida la carrera en los últimos 40 kilómetros.

—Las bazas de Pogacar y Roglic, ¿puede ser un arma de doble filo para Eslovenia?

—Sí, al final solamente ellos saben la relación que tienen, qué fidelidad puede haber del uno hacia el otro, si es que uno tiene un papel asumido… Yo entendería perfectamente que Roglic dijera que prefiere hacer su carrera y al final es verdad que no le debe nada a Tadej. Sí que está claro que sobre el papel Tadej es el número uno para una carrera así y supongo que el seleccionador esloveno querrá plantear la carrera al 100% para él.

—¿Qué motivos le llevaron a estar ausente de los Mundiales en años anteriores?

—Los recorridos influyen, no se adaptaban mucho a mí y tampoco mis temporadas estaban enfocadas a llegar al Mundial. Sinceramente, no me veía preparado como para afrontar una carrera de 270 kilómetros y a ese nivel. Entonces yo le decía a Pascual que ‘si no me preparo bien, si no es para hacerlo al 100%, prefiero no ir y que aproveche la plaza a otro corredor’. Para este año le dije todo lo contrario y más si cabe, con el percance en el Tour que me ha dejado más tiempo para recuperar, para bajar un poco la intensidad y después ir construyendo progresivamente la forma hasta llegar al Mundial.

—Romeo, Arrieta, Torres, Álvarez, Pericas… ¿Cómo ve la nueva generación de talentos españoles?

—A mí me impresiona ver a qué nivel son capaces de rendir a edades tan tempranas porque yo me veo a los 16 o 17 años con la edad que tienen estos júniors que estaban peleando ahí por las medallas y estaba muy muy lejos de ese nivel y su profesionalidad. Ha cambiado muchísimo en ese sentido el ciclismo y tienes que tenerlo claro desde muy joven que quieres ser ciclista. Tienes que hacer la apuesta desde el principio porque si no es muy complicado dar el salto a profesionales. Y en mi época fue totalmente diferente, al final eran las excepciones la gente que brillaba con 19 o 20 años. Es que ha cambiado y te tienes que adaptar a los cambios. Se ve que en España también hay muchos chavales jóvenes que se están adaptando muy bien y que están rindiendo ya desde muy jovencitos.

Lo más visto

Más noticias