Muere Bernardo Ruiz, leyenda del ciclismo español, a los 100 años

Un pionero del ciclismo español como Bernardo Ruiz falleció la pasada noche a los 100 años en su Orihuela natal. Se trataba del ganador de La Vuelta más longevo actualmente, ya que el alicantino triunfó en la edición de la ronda española de 1948. El pasado mes de enero recibió un bonito homenaje en vida en su localidad cuando alcanzó la centena de años. AS le acompañó y es que El Pipa, como era conocido, fue considerado el primer ciclista profesional en España.

Ruiz, que dio sus primeras pedaladas por necesidad para dedicarse al estraperlo y ayudar a su familia tras la Guerra Civil, fue uno de los pioneros del ciclismo español logrando éxitos como la general de la Vuelta a España en 1948, donde entró como campeón en el Santiago Bernabéu a la conclusión de la última etapa. Además, Ruiz fue el primer español en ganar etapas en las tres grandes vueltas (pionero nacional con su etapa en el Giro de 1955) y en subir al podio en el Tour de Francia con su tercer puesto en la edición de 1952 tras Fausto Coppi y Stan Ockers.

Entre las numerosas habilidades que demostró Bernardo Ruiz durante su etapa como ciclista, una era la de evitar los pinchazos en las ruedas, algo que su hijo Bernardo explicaba así a AS: “Aprovechaba la grasa del jamón para tratar los tubulares. Luego los colgaba a secar un par de días y eso hacía que las piedras resbalasen”. Bernardo Ruiz tuvo durante muchos años el hito de ser el ciclista que más grandes vueltas había logrado completar de manera consecutiva con hasta 12 participaciones seguidas entre Giro, Tour y Vuelta, una hazaña que logró superar el australiano Adam Hansen en la Vuelta a España 2015.

Triple campeón de España (y también llegó a serlo en Montaña), su trayectoria como ciclista fue de 1946 a 1958 y, después, pasó unos años como director deportivo guiando a Angelino Soler, el ganador más precoz de La Vuelta al hacerlo en 1961 con 21 años. Más tarde, El Pipa montó un establecimiento de motocicletas y bicicletas, y es que esta última siempre estuvo ligada a su vida. Su hijo, también Bernardo, el que cuida con mimo todas las conquistas de su padre, recordó en AS la forma en la que es, y será, recordado Ruiz a nivel humano: “Cada vez que iba a Francia a correr el Tour venía cargado de tubulares, piñones y hasta los farmacéuticos de la zona le pedían que se trajera penicilina porque aquí no había. Todo era para sus amigos, para sus familiares. Siempre estaba dispuesto a ayudar".

En reconocimiento a su extraordinaria trayectoria y a los méritos que le hicieron merecedor de la más alta distinción municipal, el Ayuntamiento de Orihuela decretó luto oficial los días 14 y 15 de agosto en todo el término municipal de Orihuela, durante los cuales las banderas ondearán a media asta en los edificios públicos. Fue nombrado Hijo Predilecto y Su nombre da identidad al Pabellón Deportivo Municipal. Un mito.

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