De la Cruz: “No me lo creo, la verdad, esto es algo mágico”

Varios minutos en una acera, esperando, consciente del gran tiempo que había hecho pero sin saber el resultado final. Así estuvo David de la Cruz en una céntrica calle de Galapagar, junto al velódromo, esperando noticias. Estaba a un paso de romper una sequía de seis años, de irrumpir como relativa sorpresa ante los Movistar y de dar un golpe sobre la mesa tras un invierno complicado. Su compañero Xabier Mikel Azparren también se sentó a su lado. Tocaba esperar... y después, a la entrada en meta de Lazkano (que felicitó a su paso por esa zona a David), llegó el júbilo e incluso algunas lágrimas en el equipo Q36.5. De la Cruz era campeón de España. En el trascurso desde esa zona de Galapagar hasta el podio, el catalán dialogó con AS en su primera entrevista como campeón.

-Campeón de España. ¿Cómo se siente?

No tengo palabras, la verdad. Es la segunda vez que lo intento en los Nacionales. En 2021 me quedé a tan solo un segundo de ganar (el triunfo fue para Ion Izagirre) y cuando llegué aquí (Comunidad de Madrid) sabía que era el momento. El objetivo era ganar y preparé muy bien el año para esta cita. Trabajo específico, posición sobre la bici... salí con la idea de que era una oportunidad que no podía dejar escapar y me lo repetía durante todo el recorrido. Estoy que no me lo creo. Ser campeón de España es algo mágico.

-Si le dicen esto en octubre, noviembre, esos meses tan complicados que tuvo, ¿qué pensaría?

Bueno, siempre confié en que podía conseguir algo así. Cierto es que en los últimos años me alejé un poquito del nivel que solía tener en las cronos (en la Vuelta Andalucía 2018 ganó una etapa de este tipo) pero cuando vine al Q36.5 y vi el material que teníamos pensé uf, con esta bici tenemos muchas opciones de conseguirlo.

-Llevaba ya gran parte de la semana en la zona, reconociendo el recorrido. ¿Le sorprendió?

El primer día, cuando lo hice, me pareció duro. Muy duro. Y esta vez, en los Nacionales, siento que fue más duro todavía. Esta semana pegaba el aire a favor y en la parte final ayudaba y este viernes no. Tampoco había una zona donde recuperar. Fue una crono muy agónica, pero satisfecho con el resultado.

-Las estimaciones decían que el ganador haría un tiempo alrededor de 39 minutos. Hizo 38:33.

No tenía ningún tiempo en mente, solo dar todo lo que tenía. He llegado muerto a meta. Cuando en el tramo final me decían desde el coche ‘David, saca lo que tienes’ iba pensando en que ya había hecho eso durante los diez últimos kilómetros.

-¿Un impulso de motivación?

Totalmente, y ahora a cerrar con buen sabor de boca el domingo en la prueba de ruta (será en San Lorenzo de El Escorial).

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