Zunder Palencia es ACB

Zunder Palencia jugará en la ACB en la temporada 2023-24 después de imponerse en la final de la Final Four de LEB Oro jugada en el Coliseum de Burgos a los anfitriones de Hereda San Pablo Burgos (95-83). Se enfrentaban el mejor equipo, contra la mejor plantilla y salió vencedor el primero, el que terminó subcampeón en la liga regular y fue capaz de derrotar a Andorra en la final de la Copa Princesa. Con un encuentro tremendo de Ortega, 32 puntos y 34 de valoración, muy bien acompañado de McGrew (valorado con 27). Hace justicia este ascenso a equipo más regular de la temporada, con permiso de los del Principado, y a la historia. El Palencia fue campeón de la LEB Oro en la temporada 2015-16 y no pudo ascender por cuestiones económicas. Ahora no habrá excusa. Zunder Palencia será ACB, jugará en la Liga Endesa la temporada que viene.

El Palencia demostró desde el primer momento que tenía claro su plan, el mismo que le hizo subcampeón de la liga regular y campeón de la Copa Princesa: defensa fuerte en la zona, impidiendo las maniobras de los pívot burgaleses, y gran acierto en ataque, lo que le llevó a los 28 puntos en los primeros 10 minutos gracias a la primera decena de puntos de Ortega, que sería el mejor jugador del partido. Los burgaleses, por su parte, se apoyaban en el trabajo de Thomas y Norelia para sumar y mantenerse en un cuarto en el que, salvo en la canasta inicial, fueron por detrás en el marcador (28-22).

Como ocurriera el sábado, Mahalbasic fue el encargado de sostener en los malos momentos a Burgos. El pívot austriaco lo mismo repartía asistencias, que anotaba de tres o sacaba faltas a sus rivales, mientras Palencia no se salía del plan inicial y repartía sus puntos entre Ortega y Manu Rodríguez para sostener la ventaja, pese a que los de Segura llegaron a ponerse por delante en algún momento, pero al descanso el resultado era de 50-42. Y es que pese a que el rebote estuvo muy igualado, 14-12, el acierto fue morado con 18 canastas de 34 intentos, por 12 de 28 en los burgaleses, destacando por los palentinos también el acierto de McGrew, que sumó 10 puntos con un 100% en sus tiros.

Como suele ser habitual, y le pasó también en semifinales ante el Guipúzcoa, San Pablo Burgos tenía que remar contracorriente, debía remontar, pero no comenzaron bien los anfitriones porque la ventaja morada aumentó a los 13 puntos (55-42 a falta de casi ocho minutos para el final del tercer cuarto), lo que obligó a Curro Segura a pedir tiempo muerto, que logró reducir hasta 55-48. Misma solución y mismo resultado para Pedro Rivero: parar el partido con otro tiempo que le vino de miedo porque los morados, de nuevo, abrieron hueco (67-51), la máxima diferencia hasta ese momento. Lo cierto es que todos los intentos burgaleses se encontraban con una buena defensa palentina y un Schmidt que en los momentos calientes hizo que los morados siempre estuvieran por encima de los 10 puntos de ventaja en el cuarto que terminó con 73-61.

De esta manera, los de Curro Segura afrontaban el más difícil todavía, tratar de remontar 12 puntos, en la final por ascender a ACB y con un Coliseum volcado. A falta de 7:45, los burgaleses bajaron la barrera de los 10 puntos (76-67), ante un bloqueo momentáneo palentino que veía cerca el ascenso, pero que tenía a Wintering en su seguro de vida y que mantuvo siempre a los palentinos por delante, lo que hacía vibrar a la zona de aficionados morados. San Pablo Burgos trató de poner toda la carne en el asador, pero con más corazón que cabeza, con más ganas que acierto, pero no fue suficiente para, ni siquiera, acercarse a los palentinos que terminaron venciendo (95-83) y ascendiendo.