Carmelo: “No todo el mundo gana una medalla de oro”
El exjugador estadounidense afirmó que da más importancia a las medallas olímpicas que ha obtenido que a un título de la NBA.
Carmelo Anthony, exjugador de la NBA y de la selección estadounidense, confesó en una entrevista que valora más las medallas de oro olímpicas (cosechó tres en su carrera deportiva) que un título de la NBA (no ganó ninguno). Contó que la razón es lo complicado que es ganar o conseguir distintos logros en unos Juegos.
“Tres medallas de oro o cuatro medallas para mí es más grande que el campeonato de la NBA porque entiendo el impacto que tienen”, contó el exjugador de los Lakers, considerado como uno de los mejores jugadores de la historia de Estados Unidos y uno de los grandes en el baloncesto de FIBA. “No todo el mundo gana una medalla de oro, no todo el mundo gana una de plata o una de bronce; son pocos los atletas de nuestro país de los que podemos decir que han ganado medallas, por no hablar de oros”. Expresaba.
Anthony ha participado en un total de cuatro Juegos Olímpicos con su selección, en los cuales ha obtenido cuatro preseas, tres de oro (Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016). También cuenta con un bronce en Atenas 2004. Según sus declaraciones, para él, estos logros, tienen un significado importante por su dificultad para adquirirlos. Tampoco quiso desmerecer el trabajo que implica conseguir un título de la NBA: “Cuando tienes esa perspectiva, es una completamente distinta. Sí, por supuesto que quiero un campeonato de la NBA, todos lo queremos, sí, pero hay muchas cosas que tienen que pasar para que ganes un campeonato de la NBA, por no hablar de varios campeonatos”.
Carmelo Anthony debutó en la NBA con los Denver Nuggets, franquicia que lo escogió en la primera ronda del draft de 2003 en la tercera posición. En su sexto partido con los de Colorado, durante su temporada como novato, logró la proeza de convertirse en el segundo jugador más joven, por detrás de Kobe Bryant, en anotar 30 puntos en un partido. Jugó en el equipo hasta 2011, año en el que se marchó a Nueva York para jugar con los Knicks. En este equipo también obtuvo grandes logros personales: en 2013, se convirtió en el primer jugador en anotar más de 40 puntos en tres partidos consecutivos, solo lo había logrado antes Bernard King en la historia del equipo de Nueva York. Rompió el récord de puntos anotados en un solo partido con los Knicks en 2014, cuando anotó 62 contra los Charlotte Bobcats. Manteniendo este tope aún en la actualidad. Pese a no lograr el MVP, con los Knicks consiguió ser el máximo anotador de la NBA una temporada con 28,7 puntos por partido.
En 2017, volvió a hacer las maletas, esta vez para marcharse a Oklahoma City. Con los Thunder, superó los 25.000 tantos en la NBA, convirtiéndose en el 21º jugador en lograrlo. En 2018, cae en los Atlanta Hawks con los que no llegó a jugar ningún partido. Más tarde firmó con los Houston Rockets durante una temporada. No terminaron los movimientos pues tras disputar diez partidos es traspasado a los Chicago Bulls, donde duró tan solo diez días. En 2019 se va a los Blazers donde disputó dos temporadas.
Finalmente, se mudó a Los Ángeles en 2021, equipo en el que dio fin a su carrera. En la franquicia angelina logró convertirse en el noveno máximo anotador en la historia de la Liga, superando los 27.409 de Moses Malone, quien actualmente ocupa la undécima posición de los máximos anotadores de la NBA.
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