Markkanen puede más que Tavares

El Mundial ha sido una mala experiencia para Lauri Markkanen. El ala-pívot, que se enroló en el servicio militar (obligatorio en Finlandia) cuando acabó la temporada con Utah Jazz, llegó al campeonato con cartel de gran estrella. Por su extraordinario papel en el Eurobasket del año pasado y por su condición de all star de la NBA en una temporada tremenda en la que promedió más de 25 puntos y 8 rebotes por partido. Pero la primera fase fue frustrante para un jugador (26 años) que no encontró su ritmo dentro de un equipo que estuvo lejísimos de aquella fresca sorpresa del Eurobasket. Las derrotas contra Australia y Alemania parecían lógicas. ¿La debacle con Japón? Eso fue otra cosa.

En un grupo difícil y lejos de su mejor versión, Finlandia se ha visto abocada al purgatorio de la lucha por las plazas 17-32, un nuevo enfoque tras los cuartos de final del Eurobasket. En esa nueva realidad, su primera rival fue Cabo Verde (ganó Finlandia 77-100), una selección feliz por estar en su primer Mundial (el país más pequeño que se clasifica), que ya ganó su partido en la primera fase pero que se mantiene alerta porque ningún africano se clasificó para la segunda fase entre los 16 primeros. Así que el mejor del continente es este otro cuadro tendrá plaza en los Juegos Olímpicos de París. Del mismo modo, Finlandia busca plaza en los Preolímpicos.

El partido tuvo poca historia: Finlandia se escapó en el primer cuarto (16-28) y controló el juego en ventajas que rondaron casi siempre la veintena. Un ritmo mucho más alto, más precisiones y mucha más puntería exterior (14/36 en triples por el 3/19 de su rival) en una demostración de que su nivel es intermedio, más bajo que el de los mejores del Mundial pero más alto que el de muchos de los que están ahora en su mismo vagón. Y tiene a Markkanen, claro, un jugador para partidos más gruesos, citas más grandes. El ala-pívot acabó con 34 puntos, 9 rebotes y 37 de valoración. Y con un 10/13 en tiros de dos. La cuestión no es su capacidad (obvia) para dominar contra Cabo Verde, tendría que ser su flojo nivel (sobre todo tirando por fuera) en demasiados momentos de la primera fase.

Enfrente, Cabo Verde puso energía, físico, optimismo y el baloncesto que pudo con sus obvias limitaciones. Will Tavares tardó demasiado en aparecer esta vez, y de inicio empujaron Almeida (17 puntos) y Correia (15). Edy Tavares jugó más de 31 minutos y terminó con 14 puntos, 12 rebotes, 25 de valoración y un 5/6 en tiros. El pívot del Real Madrid sufrió de inicio, con Finlandia jugando muy abierto y con mucha circulación, evitando su zona de máxima influencia. A base de rebotes y de pedir la bola en la zona, fue entrando con mucho esfuerzo en el partido, tuvo sus momentos e hizo, como siempre, lo que pudo. Cabo Verde jugará ahora, el viernes, contra Japón.