En Islandia sin Scariolo

La introducción en 2017 de las Ventanas de clasificación para el Eurobasket o el Mundial por parte de la FIBA en los meses fijados tradicionalmente para las competiciones de clubes, provocó un cisma en el baloncesto europeo (con réplicas sísmicas en el sudamericano) que aún no se ha cerrado. Desde hace cinco años, la guerra Euroliga-FIBA no ha tenido ni un solo tratado de paz, aunque sí pequeñas treguas cuando el agua más apretaba el pase de las selecciones.

España, por ejemplo, se benefició de uno de esos paréntesis en la Ventana de noviembre de 2022. La Euroliga adelantó el derbi italiano Milán-­Bolonia para que no coincidiera con el Italia-España de Pésaro. Así, el equipo transalpino pudo contar con seis internacionales; y la Selección, con Scariolo, técnico tanto de España como de la Virtus.

Un favor entre las partes que el conjunto nacional no requiere para esta última Ventana. Clasificada para el Mundial, que se disputa entre Filipinas, Indonesia y Japón del 25 de agosto al 10 de septiembre, jugará este jueves en Islandia (20:45 horas, Tdp) sin el maestro de Brescia en el banquillo. Scariolo prepara en Bolonia el duelo de mañana entre la Virtus y el Baskonia de la 25ª jornada de la Euroliga tras dirigir los entrenamientos de la Selección en Alicante el lunes y el martes. No estará en Reikiavik, pero sí en Cáceres el domingo contra Italia (19:00 horas, TDP).

Su reemplazo hoy en el Laugardalshöll, el Señor de las Defensas, Luis Guil. Al sevillano de 51 años no le preocupa la ausencia de su jefe. “Ha montado una estructura y un método de trabajo que estamos haciendo igual. Estamos en contacto directo y nuestras reuniones previas al partido y entrenamientos las estamos haciendo por Zoom, preparamos todo conjuntamente”, asegura el principal asistente de Scariolo. Ambos se conocen bien: trabajan juntos en el banquillo nacional desde el inicio de las Ventanas en 2017. “Él da las directrices y nosotros ejecutamos. Para nosotros va a ser como un partido más porque Sergio (Scariolo) va a estar tutorizando desde Italia y esperemos que, como siempre, España compita al 100% y podamos aspirar a ganar el encuentro”, concluye Guil, que cuenta con una plantilla muy joven (Bassas es el único que supera los 30) y poco experimentada: solo Alberto Díaz y Parra superan la decena de internacionalidades.