Lituania tumba al mejor Porzingis

Letonia fue la sensación del Mundial de 2023, pero en su Eurobasket no ha durado mucho. Riga despidió en octavos a los suyos, que cayeron (88-79) ante una Lituania herida, pero que supera ese cruce que en 2022 le dejó fuera de juego cuando, sintiéndose muy favorita, perdió con España en la prórroga. Ahora, el gigante báltico, que lleva una década sin subir al podio (plata en los Europeos de 2013 y 2015), se medirá en cuartos con el ganador del Grecia-Israel de este domingo (20:45).

Lituania arrancó fuerte, con un 7-0 de inicio y con 3/3 en triples se disparó hasta el 14-6. Porzingis estaba demasiado solo para frenar las arremetidas rivales, pero la anfitriona resistía (16-10); siete de los diez puntos de Letonia llevaban la firma del nuevo jugador de los Hawks, que acabó con números de otra galaxia: 34 puntos y 19 rebotes para 39 de valoración. Rihards Lomazs, el otro jugador más inspirado entre los de Banchi, puso el 28-26 para amenazar con una remontada que no se llegó a producir: Letonia nunca llegó a ir por delante.

Valanciunas puso orden y Sedekerskis, desde el triple, calmó los ánimos en un equipo que sobrevivió a otro arreón letón (34-31 tras fallar el libre de un 2+1 Rolands Smits). Al descanso, 47-37 con 14 puntos de Arnas Velicka, que amenazaba con el partido perfecto (5/5 en tiros de campo, incluido 3/3 en triples, y un fallo en el tiro libre). El base del Neptunas Klaipedas ha tenido que dar un paso al frente tras la lesión de Rokas Jokubaitis y lo ha hecho (en octavos, 21 puntos y 12 asistencias), aunque lo cierto es que Lituania estaba también demostrando ser cuna de buenos tiradores: 6/11 en triples (55% de efectividad).

Letonia resistía con Kristpas Porzingis, que mostró de lo que es capaz con un rebote que culminó volando para machacar (13 tantos y 8 rebotes, aunque 4/11 en el tiro), y Rihards Lomazs (6 y 4 asistencias), pero los hermanos Bertans se marcharon a los vestuarios sin haber aportado ningún punto para lo suyos.

Aunque en el tercer cuarto Porzingis ya había alcanzado un doble-doble (15 puntos y 10 rebotes), poco podía hacer Letonia, incapaz de bajar de la barrera de los ocho puntos. Lituania, en cambio, daba un pasito más y ampliaba su renta hasta los 15 (75-60) con un tiro libre de Sedekerskis. El partido se puso cuesta arriba para la anfitriona que, eso sí, nunca bajó los brazos y con un par de triples de un inspirado Lomazs (21 puntos al final) revolucionó el partido: 82-77 con 41 segundos por jugarse. Porzingis, con un mate tras rebote ofensivo, colocó el 84-79 a falta de 24,4 segundos, pero Letonia se frenó ahí. Antideportiva de Lomasz que no perdonó Sargiunas. Adiós a la anfitriona y fin a la era Banchi en Letonia.

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