“La patria chica de Domas son Torremolinos y Los Guindos”

“Básicamente, soy malagueño”. Antes de debutar en el Rising Star de la NBA que se disputó en 2018 en el Staples Center de Los Ángeles, Domantas Sabonis (3-5-1996) reconocía su debilidad por la que considera su tierra y a la que vuelve cada vez que puede. Aunque nació en Portland coincidiendo con el paso de su padre, Arvydas, por los Blazers, Domas se crió en Torremolinos y en la Escuela de Baloncesto de Los Guindos. Allí, a menos de un kilómetro del mar en Málaga, se hizo jugador durante doce años. “Tú eres de donde te crías, y aunque la patria grande de Domas sea Lituania, su patria chica es Málaga. Es lo que se ha pateado desde pequeño”, explica Ángel Sánchez Cañete, ayudante de Scariolo en la Selección e institución destacadísima del baloncesto malagueño. Cañete lleva toda una vida en el Unicaja.

Domantas llegó a coincidir durante un año con Alberto Díaz, que hoy será su rival. Aunque con quien realmente había labrado amistad el Pelirrojo era con Tautvydas, el menor de la saga quien, como Zigimantas, el mayor, no llegaron a triunfar. Domas sí puso toda la carne en el asador. “Siempre ha sido un jugador consistente, no cometía errores. Y, cuando cometía alguno y se le explicaba, no lo hacía más. Eso le permitió ir subiendo niveles, Ha desarrollado lo que hacía. Sabe jugar muy bien. Es prácticamente un base desde su posición”, explica Cañete.

Sabonis fue, en su momento, el jugador más joven en debutar en la historia del Unicaja con 17 años y cinco meses, de la mano de Joan Plaza. “Un tío tímido, callado, introvertido pero abierto con sus amigos”. En Málaga todos sospechaban que llegaría alto, pero para nada a ser All Star. Eso es lo que más le admira a todos de Domantas. “Un tío duro”.