Garbajosa: “Quiero llegar a un acuerdo con la Euroliga, pero no a uno cualquiera”

Jorge Garbajosa (Torrejón de Ardoz, 1977) fue elegido nuevo presidente de FIBA Europa el pasado sábado tras el apoyo de 35 de las 50 federaciones nacionales con derecho a voto. Con esta elección, el madrileño dejará su actual cargo como máximo mandatario de la Federación Española de Baloncesto (FEB). Elisa Aguilar, directora de competiciones de la FEB, ya ha manifestado su intención de presentarse a la presidencia y convertirse en la primera mujer de la historia al mando del baloncesto nacional.

“Estoy descolocado por la suerte que hemos vivido esta semana”, dijo Garbajosa en el Museo FEB, donde quiso explicar, lo primero, los motivos que le han llevado a presentar su candidatura para el principal cargo en el Viejo Continente: “Hace 11 años tuvo el honor de entrar a trabajar en la mejor federación del mundo y hace siete, de ser elegido su presidente. Tengo el mejor equipo del mundo. Pero desde un año y medio quise trasladar la mentalidad de unir, de consensos (que he desarrollado aquí) a Europa”.

Garbajosa se mostró emocionado por salir de un casa que deja en la cima del ránking mundial tras conquistar el Mundial 2019 y el Eurobasket 2022. “Me invade mucha energía por el nuevo reto, pero también la tristeza porque es la cuenta atrás para dejar la que es mi casa, la FEB. Tengo pena porque este es mi hogar: cada mañana, cuando me levantaba, me ponía la camiseta de la Selección y me iba a trabajar”.

“Tengo la suerte de dejar el baloncesto unido, una FEB unida, fuerte… La mejor federación del mundo. El lema de mi campaña era ‘mejor juntos’ y eso es lo que quiero trasladar a Europa”, continuó el exjugador, que confiesa irse “con la conciencia tranquila”, por todo el trabajo realizado en estos últimos siete años.

Uno de los temas más espinosos que deberá gestionar como presidente de FIBA Europa será el de la Euroliga. Las tiranteces desde el establecimiento, por parte de FIBA, de las Ventanas de selecciones en 2017 en los meses destinados tradicionalmente a los clubes, llevaron a un conflicto eterno, enquistado que parece, por el momento, no tener fin.

“Es un tema que afecta a todo el mundo”, asegura Garbajosa. “Quiero tender puentes con todos los estamentos, llegar a un acuerdo con la Euroliga, pero no a uno cualquiera: se deben respetar a las selecciones nacionales y las ligas domésticas”.