“Antes se hablaba de Selección A y Selección B; ahora es la Selección”

Dos madrileños, Jaime Fernández (4-6-1993) y Sebas Saiz (15-7-1994), son los únicos supervivientes del primer partido de las Ventanas que hace casi seis años y medio jugó la Selección de Scariolo en Podgorica. “No voy a decir miedo, pero sí con el respeto que infunde jugar para la Selección española. Además, nos llegaban algunos estímulos de que no había demasiada confianza en nosotros”, recuerda Jaime Fernández para contextualizar el escenario en aquel otoño de 2019. La ausencia de jugadores de Euroliga y NBA en la fase de clasificación podía poner en riesgo la presencia de España en el Mundial.

Por eso, meses antes, Scariolo había puesto en marcha el Plan Benahavís. Dieciséis jugadores, entre los estaban Jaime y Sebas Saiz (también, aunque no estuvieron en el debut de Podgorica, Alberto Díaz y Abalde de los que están en esta lista), se concentraron en la localidad malagueña. Para entonces, la FEB ya sabía que no contaría con sus estrellas, así que el entonces presidente, Jorge Garbajosa, y el seleccionador se anticiparon en el tiempo. “Fue importante porque no partimos de cero”. Aquel equipo fue bautizado como Selección B. Algo que hizo poca gracia y que, como el tiempo demostró, no estaba justificado. “Recuerdo que los dos primeros fueron partidos muy mediáticos. Además, hicimos un juego muy brillante y nos sentimos muy orgullosos de lo que habíamos hecho. Fue una reivindicación del jugador español. Demostramos que, más allá de las estrellas, había jugadores válidos. Se hablaba entonces de Selección A y Selección B. Ahora hablamos de Selección. Eso sí lo hemos cambiado”. En aquellos 16 de Benahavís hay campeones del mundo (Rabaseda, Oriola, Pau Ribas y Colom en 2019), de Eurobasket (Jaime Fernandez y Alberto Díaz), medallistas continentales (Vives y Sastre).

“Lo comentaba con Sebas hace poco. De aquel inicio de las Ventanas ya hay unos cuantos jugadores retirados (Fran Vázquez, Sergi Vidal, Oliver..). Es una alegría seguir aquí, sintiéndonos parte de la familia”, recuerda Jaime, que ha demostrado un tremendo compromiso todos estos años. Campeón del Eurobasket en 2022, se quedó fuera en el último minuto de los Mundiales de 2019 (China), el último de 2023 y los Juegos Olímpicos de Tokio. Lejos de renunciar, exhibe humildad: “A veces se me ha requerido para una cosa; otras, para otra. A veces estás entre los doce y a veces no. Cada ocasión de vestir la camiseta de la Selección es un orgullo”. Estos días, hasta está disfrutando de Ricky. “Es uno de los deportistas españoles más grandes de la historia y tenerlo de vuelta es importante”. También lo es tener a esta clase media que representan Jaime o Sebas Saiz y que han estado siempre que se les ha pedido