L’Alqueria tumba al campeón de Europa

La victoria del Valencia Basket ante el Efes se recordará por mucho tiempo en La Fonteta (81-71). Es el triunfo de un modelo. Obligado por las circunstancias, sí. Pero es una victoria que refrenda el proyecto de L’Alqueria, un triunfo que corrobora la apuesta por la cantera y que, por sí solo, llena de argumentos a aquellos que defienden que la sostenibilidad del Valencia pasa por esto.

Harper, Van Rossom, Hermannsson, Millán, Claver, Rivero... y a última hora la estrella del equipo: Chris Jones. Bajas por lesión. Han ido cayendo como moscas. La sensación era que el campeón de Europa se iba a pasear en La Fonteta. Pero no. Simbólicamente fue el primer triunfo de L’Alqueria del Basket... que tumbó al campeón de la Euroliga. Porque Puerto firmó el mejor partido de su carrera (15 puntos, 7 rebotes para 21 de valoración con 4 de 4 en triples). El mate por encima de Singleton fue de NBA. Pero no estaba sólo. Ferrando dirigió al equipo sin titubear, alternándose con una gran Radebaugh en el puesto de base; Lucas Marí, 17 años, debutó en minutos importantes, defendiendo a un tal Micic, a un tal Dunston... A gente que ya jugaba en Euroliga cuando él aún jugaba en el parque. Y debutó De Larrea, en los minutos finales, que aún le dio tiempo para hacer una filigrana en la última jugada del partido.

La cara de Ataman tras el partido era un poema. Una constelación de estrellas había sido batida por un grupo de animosos e inspirados jugadores taronjas que firmaron un partido histórico. El arreón de James Webb en el último acto (14 puntos) fue el que clavó la daga en el corazón del conjunto otomano.

Con siete bajas y con el recién repescado Ferrando como único base sano, el Valencia se presentó en un partido contra el actual campeón de la Euroliga. Quizás por eso, el equipo de Mumbrú salió a la cancha sin complejos. Mandó ante un Efes totalmente frío, sin ningún acierto en el tiro exterior. Capitán Dubljevic tomó la iniciativa. Le tocaba. Con ocho puntos (dos triples) lideró a su equipo en el primer acto. En el Efes, Pleiss era la blandura personificada y hasta que no salió Clyburn apenas habían anotado. Un triple de Radebaugh y una canasta en contrataque de López Arostegui le dieron la ventaja a los taronjas en los primeros diez minutos (16-13).

La Fonteta pide esto. Puerto puso la caldera a todo gas. Un vuelo sin motor sobre la cabeza de Singleton que acabó en mate del canterano puso la máxima hasta entonces (20-15, min. 12). Larkin, que sigue con su puesta a punto, redujo enseguida con cinco puntos seguidos pero este Valencia no se iba a parar. Hasta donde llegara. Era día para eso, de no parar. López-Arostegui contestó con otro triple a un Efes que se empezaba a calentar. Aunque en el tiro de tres fue un desastre (3 de 16 en el primer tiempo). De nuevo Puerto (8 puntos y 5 rebotes en la primera mitad) clavó otro triple para poner al Valencia cuatro arriba. Pero la calidad de Micic respondió desde el 6,75 para dejarlo 31-30 al descanso.

El Valencia ya le había dicho al Efes que si quería sumar en La Fonteta no iba a ser paseándose. Y siguió... y siguió. Puerto mantenía a su equipo. El Efes empezaba a dominar físicamente, cargando el rebote ofensivo. Clyburn puso al Efes cuatro arriba pero Pradilla redujo de tres (42-43). Radebaugh, con otro triple relanzó a La Fonteta (49-47, min. 27). El Valencia iba sobre raíles. Pero en ese momento surgió la calidad de Larkin y Micic que, unida a un par de decisiones arbitrales, hizo que por primera vez en todo el duelo, el Efes diera un tirón. Una técnica a Mumbrú dejó el parcial en 0-9 y el total en 49-56. Pero otra vez Puerto, sobre la bocina, la clavó de tres para darle vida a su equipo (52-56).

¡Y qué vida! Clyburn metió la primera y puso un 52-58 con el que el Efes ya se creía que el triunfo estaba encarrilado. Craso error. Después de que Pleis metiera un tiro de cuatro metros y pusiera el 57-60, se desató la tormenta perfecta taronja de la mano de James Webb III. Un parcial de 18-2, con 13 puntos del norteamericano, tumbaba al bicampeón de Europa (75-62, min. 38). Por segunda vez esta temporada. Larkin lo intentó a la desesperada pero el triunfo ya era taronja. L’Alqueria había tumbado al campeón de Europa.